sábado, 30 de julio de 2022

EN COMUNIÓN CON LA TRADICIÓN VIVA DE LA IGLESIA Domingo 31 de julio 2022



¡Construiré graneros más grandes! ¿Por qué habían producido tanto las tierras de este hombre que no iba a hacer más que un mal uso de sus riquezas? Para que se manifieste con mayor esplendor la inmensa bondad de Dios que da su gracia a todos, porque hace caer la lluvia sobre justos e injustos, hace salir el sol tanto sobre los malvados como sobre los buenos (Mt 5,45). Los beneficios de Dios para este hombre rico eran: una tierra fecunda, un clima templado, abundantes semillas, bueyes para labrar, y todo lo que asegura la prosperidad. Y él ¿qué le devolvía? Un mal humor, misantropía y egoísmo. Es así como agradecía a su bienhechor. Olvidaba que todos pertenecemos a la misma naturaleza humana; no pensó que era necesario distribuir lo superfluo a los pobres; no tuvo en cuenta ninguno de los preceptos divinos: No niegues un favor a quien es debido .si en tu mano está el hacérselo (Pr 3, 2n parte tu pan con el hambriento (Is 58, 7). Todos los profetas y los sabios le proclamaban estos preceptos, pero él se hacía el sordo. Sus graneros estaban a punto de romperse por demasiado estrechos para el trigo que metía, pero su corazón no estaba saciado. No quería despojarse de nada, aunque no llegara a poder guardar todo lo que poseía. Este problema le angustiaba: ¿Qué haré?, se repetía. ¿Quién no tendría lástima de u n hombre tan obsesionado? La abundancia le hace infeliz. Se lamenta igual como los indigentes: ¿Qué haré? ¿Qué comeré? ¿Con qué me vestiré? Eso es lo que dice este rico. Sufre su corazón, la inquietud le devora, porque lo felicidad. Lo que atormenta a su alma es tener demasiadas riquezas al rebosar sus graneros»

(San Basilio Magno [329-379]. Homilía 6, sobre las riquezas).

Domingo XVIII del Tiempo Ordinario Ciclo C Domingo 31 de julio 2022



¿QUÉ BIENES BUSCAMOS?
 
Ecli, 1,2; 2, 21-23; Sal 89; Col 3, 1-5. 9-11; Lc 12,13-21
 
Lucas empieza una larga meditación sobre los graves peligros que corremos cuando anhelamos los bienes materiales. En nuestro texto, se focaliza el vicio de la avaricia ejemplificado por la parábola de un hombre rico. A primera vista, este hombre no parece tan malo, sino simplemente prudente. Tiene una gran cosecha y quiere construir graneros suficientes para guardarla, lo cual parece sensato. Sin embargo, su frecuente uso de las palabras "yo" y "mío" sugiere que no es tan prudente. Al contrario, es egoísta, codicioso, avaro: en una palabra, es insensato. Quiere todo para sí mismo y pretende hallar su seguridad en sus riquezas. No reconoce, como lo expresa nuestra lectura del Eclesiastés, que toda riqueza es "vanidad", en hebreo hebel o vapor insubstancial. El antídoto contra tal avaricia sugiere la Carta a los colosenses, es buscar los bienes de arriba.
 
 
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 69, 2. 6
Dios mío, ven en mi ayuda; Señor, date prisa en socorrerme. Tú eres mi auxilio y mi salvación; Señor, no tardes.
 
 
GLORIA
 
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
 
 
ORACIÓN COLECTA
 
Ayuda, Señor, a tus siervos, que imploran tu continua benevolencia, y ya que se glorían de tenerte como su creador y su guía, renueva en ellos tu obra creadora y consérvales los dones de tu redención. Por nuestro Señor Jesucristo ...
 
 
LITURGIA DE LA PALABRA
 
PRIMERA LECTURA
 
¿Qué provecho saca el hombre de todos sus trabajos?
 
Del Eclesiastés (Cohélet): 1,2; 2, 21-23
 
Todas las cosas, absolutamente todas, son vana ilusión. Hay quien se agota trabajando y pone en ello todo su talento, su ciencia y su habilidad, y tiene que dejárselo todo a otro que no lo trabajó. Esto es vana ilusión y gran desventura. En efecto, ¿qué provecho saca el hombre de todos sus trabajos y afanes bajo el sol? De día dolores, penas y fatigas; de noche no descansa. ¿No es también eso vana ilusión? Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
SALMO RESPONSORIAL
 
Del salmo 89, 3-4. 5-6. 12-13. 14. 17.
R/. Señor, ten compasión de nosotros.
 
Tú haces volver al polvo a los humanos, diciendo a los mortales que retornen. Mil años son para ti como un día, que ya pasó; como una breve noche. R/.
 
Nuestra vida es tan breve como un sueño; semejante a la hierba, que despunta y florece en la mañana y por la tarde se marchita y se seca. R/.
 
Enséñanos a ver lo que es la vida y seremos sensatos. ¿Hasta cuándo, Señor, ¿vas a tener compasión de tus siervos? ¿Hasta cuándo? R/.
 
Llénanos de tu amor por la mañana y júbilo será la vida toda. Que el Señor bondadoso nos ayude y dé prosperidad a nuestras obras. R/.
 
 
SEGUNDA LECTURA
 
Busquen los bienes de arriba, donde está Cristo.
 
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 3, 1-5. 9-11
 
Hermanos: Puesto que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios. Pongan todo el corazón en los bienes del cielo, no en los de la tierra, porque han muerto y su vida está escondida con Cristo en Dios. Cuando se manifieste Cristo, vida de ustedes, entonces también ustedes se manifestarán gloriosos juntamente con él.
Den muerte, pues, a todo lo malo que hay en ustedes: la fornicación, la impureza, las pasiones desordenadas, los malos deseos y la avaricia, que es una forma de idolatría. No sigan engañándose unos a otros; despójense del modo de actuar del viejo yo y revístanse del nuevo yo, el que se va renovando conforme va adquiriendo el conocimiento de Dios, que lo creó a su propia imagen.
En este orden nuevo ya no hay distinción entre judíos y no judíos, israelitas y paganos, bárbaros y extranjeros, esclavos y libres, sino que Cristo es todo en todos.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 5, 3
R/. Aleluya, aleluya.
 
Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos. R/.
 
 
EVANGELIO
 
¿Para quién serán todos tus bienes?
 
Del santo Evangelio según san Lucas: 12, 13-21
 
En aquel tiempo, hallándose Jesús en medio de una multitud, un hombre le dijo: "Maestro, dile a mi hermano' que comparta conmigo la herencia". Pero Jesús le contestó: "Amigo, ¿quién me ha puesto como juez en la distribución de herencias?". Y dirigiéndose a la multitud, dijo: "Eviten toda clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende de la abundancia de los bienes que posea". Después les propuso esta parábola: "Un hombre rico obtuvo una gran cosecha y se puso a pensar: '¿Qué haré, porque no tengo ya en dónde almacenar la cosecha? Ya sé lo que voy a hacer: derribaré mis graneros y construiré otros más grandes para guardar ahí mi cosecha y todo lo que tengo. Entonces podré decirme: Ya tienes bienes acumulados para muchos años; descansa, come, bebe y date a la buena vida'. Pero Dios le dijo: '¡Insensato! Esta misma noche vas a morir. ¿Para quién serán todos tus bienes?'. Lo mismo le pasa al que amontona riquezas para sí mismo y no se hace rico de lo que vale ante Dios". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
 
 
PROFESIÓN DE FE
 
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
 
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.
 
 
PLEGARIA UNIVERSAL
 
Invoquemos, hermanos, a Dios Padre, pidámosle que escuche nuestras oraciones y roguémosle con fe que venga en auxilio de nuestras necesidades, digamos confiadamente: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
 
Oremos por el Papa Francisco, por nuestro obispo N., por todos los obispos y sacerdotes, para que el Señor los haga santos y les conceda el espíritu de sabiduría a fin de que proclamen con rectitud la verdadera palabra. Roguemos al Señor.
 
Oremos por los que están lejos de sus hogares, por los viajeros, por los que se encuentran en peligro, para que el Señor les conceda un ángel que los proteja y los aleje de todo mal.
 
Oremos por los hombres de todos los pueblos y de todas las religiones, para que el Señor les revele su bondad y dirija su camino hacia el conocimiento de la verdad plena. Roguemos al Señor.
 
Oremos por nuestros hermanos que han muerto en el Señor; que Dios perdone sus pecados, acoja sus almas junto a él y los conduzca al lugar del descanso, de la luz y de la paz. Roguemos al Señor.
 
Dios nuestro, principio y fin de todas las cosas, que, en Cristo, tu Hijo, nos has llamado a la posesión de tu reino, escucha nuestras oraciones y no permitas que, mientras nos esforzamos por someter la tierra, nos dejemos cautivar por el deseo de poseer los bienes terrenales, y nos olvidemos de buscar siempre y por encima de todo aquello que nos hace ricos a tus ojos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
 
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
PREFACIO
 
El Misterio Pascual y el Pueblo de Dios
 
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, por su Misterio Pascual, realizó la obra maravillosa de llamamos de la esclavitud del pecado y de la muerte al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de tu propiedad, para que, trasladados por ti de las tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas. Por eso con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.
 
 
 ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sb 16, 20
 
Nos has enviado, Señor, pan del cielo, que encierra en sí toda delicia, y satisface todos los gustos.
 
 
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
 
Acompaña, Señor, con tu permanente auxilio, a quienes renuevas con el don celestial, y a quienes no dejas de proteger, concédeles ser cada vez más dignos de la eterna redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.
  

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220731

 

Uno de los problemas más apremiantes de nuestra época moderna es la falta de seguridad espiritual. Los modernos nos encontramos desvinculados de la sociedad, del medio ambiente, y hasta de Dios. Nos sentimos abandonados a los azares de la suerte y privados de puntos de referencia ciertos. Varios pensadores, como el filósofo Martín Heidegger (1889-1976) o el teólogo luterano Rudolf Bultmann (1884-1976), han dedicado tomos pesados a esta situación, dándonos algunas ideas importantes y útiles. Pero nosotros nos apoyamos en la Biblia que contiene enseñanzas extensas sobre la búsqueda de la seguridad. Mientras que la tendencia humana es hallar seguridad en los ídolos, que son los bienes materiales y que agarramos como si fueran salvavidas, la Biblia enfatiza que la seguridad se encuentra solo en el abandono confiado a él que no podemos agarrar ni ver ni controlar, es decir, Dios.

sábado, 23 de julio de 2022

Cristo nos llama a estar con Él en su gloria.

 


EN COMUNIÓN CON LA TRADICIÓN VIVA DE LA IGLESIA 20220724


Domingo 24 de julio 2022

 

«Señor, enséñanos a orar». ¿Creéis, hermanos, que Dios no sabe lo que os es necesario? El I que conoce nuestro desamparo, conoce anticipadamente nuestros deseos. Por eso, cuando el Señor enseñó el Padrenuestro, recomendó a sus discípulos a ser sobrios en palabras: Cuando oréis, no usen muchas palabras como los paganos, pues vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes que se lo pidan (Mt 6, 7-8). Si nuestro Padre sabe lo que nos hace falta ¿por qué decírselo, aunque sea en pocas palabras? Señor, si tú lo sabes, ¿es necesario orar? Ahora bien, el que aquí nos dice: No usen muchas palabras en vuestras oraciones, nos dice en otra parte: Pedid y recibirán, y para que nadie crea que lo dice como de paso, en otra parte añade: Buscad y hallaréis, y para que nadie piense que es una simple manera de hablar, observen cómo termina: Toquen y se os abrirá (Mt 7, 7). Quiere, pues, el Señor que, para recibir, primero pidas, que para hallar primero te pongas a buscar, y en fin, para entrar no dejes de llamar. ¿Para qué pedir? ¿Para qué buscar? ¿Para qué llamar? ¿Para qué cansamos orando, buscando, llamando como para hacer saber al que ya lo sabe todo? E incluso leemos en otra parte: Es preciso orar sin parar, sin cansarse (Le 18, 1). Pues bien, para aclarar este misterio ¡pide, busca, llama! Si el Señor cubre de velos este misterio, es que quiere que te ejercites en buscar y encontrar tú mismo la explicación. Todos nosotros debemos alentamos mutuamente a orar» 

(San Agustín [354-430). Sermón 80).

Cuando se logra la Evangelización

 


UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220724

 

La oración cristiana nunca debe ser una huida de la vida humana. Aunque provee momentos de descanso, consolación, y refugio durante el ajetreo que es la vida cotidiana, nunca debe ser una fuga de todo lo que es humano. Por un lado, durante la oración debemos llevar nuestra vida cotidiana -sus esperanzas, sus angustias, y sus alegrías a Dios, y ofrecérsela como un sacrificio agradable. Por otro lado, debemos volver a nuestra vida cotidiana, renovados y vigorizados para vivir más fielmente la existencia de cada día. En breve, la oración es un ejemplo de lo que el Concilio Vaticano II enseñó sobre la liturgia, aunque no es siempre litúrgica: es "la cumbre a la cual tiende la actividad de la Iglesia y al mismo tiempo la fuente de donde mana toda su fuerza"
(Sacrosanctum concilium n. 10).

DOMINGO XVII DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 24 de julio 2022

 


LA ORACIÓN Y LA VIDA HUMANA
 
Gén 18,20-32; Sal 137; Co12, 12-14; Lc 11,1-13
 
En nuestras lecturas, la oración tiene una relación clara con la vida humana. En Génesis, la oración de Abrahán es una especie de regateo con Dios acerca de la vida de los justos en Sodoma. En la Carta a los colosenses, el autor relaciona el bautismo con la vida nueva en Cristo. En Lucas, Jesús enseña el Padre Nuestro, una oración que consolida su vida y ministerio en unos versos densos. Por ejemplo, se dirige al Padre, a quien Jesús invoca a lo largo de su vida. Anhela que "venga tu Reino" (v. 2), ese Reino que era el meollo de la predicación de Cristo. Pide que "no nos dejes caer en tentación" (v. 4), porque Jesús sufrió las tentaciones del Maligno al inicio de su ministerio (Lc 4, 1-13). La oración y la vida se relacionan estrechamente en la Sagrada Escritura.
 
 
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 67, 6. 7.36
 
Dios habita en su santuario; él nos hace habitar juntos en su casa; es la fuerza y el poder de su pueblo.
 
 
GLORIA
 
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
 
 
ORACIÓN COLECTA
 
Señor Dios, protector de los que en ti confían, sin ti, nada es fuerte, ni santo; multiplica sobre nosotros tu misericordia para que, bajo tu dirección, de tal modo nos sirvamos ahora de los bienes pasajeros, que nuestro corazón esté puesto en los bienes eternos. Por nuestro Señor Jesucristo ...
 
 
LITURGIA DE LA PALABRA
 
PRIMERA LECTURA
 
No se enfade mi Señor, si sigo hablando.
 
Del libro del Génesis: 18, 20-32
 
En aquellos días, el Señor dijo a Abraham: "El clamor contra Sodoma y Gomorra es grande y su pecado es demasiado grave. Bajaré, pues, a ver si sus hechos corresponden a ese clamor; y si no, lo sabré". Los hombres que estaban con Abraham se despidieron de él y se encaminaron hacia Sodoma. Abraham se quedó ante el Señor y le preguntó: "¿Será posible que tú destruyas al inocente junto con el culpable? Supongamos que hay cincuenta justos en la ciudad, ¿acabarás con todos ellos y no perdonarás al lugar en atención a esos cincuenta justos? Lejos de ti tal cosa: matar al inocente junto con el culpable, de manera que la suerte del justo sea como la del malvado; eso no puede ser. E1juez de todo el mundo ¿no hará justicia?". El Señor le contestó: "Si encuentro en Sodoma cincuenta justos, perdonaré a toda la ciudad en atención a ellos".
Abraham insistió: "Me he atrevido a hablar a mi Señor, yo que soy polvo y ceniza. Supongamos que faltan cinco para los cincuenta justos, ¿por esos cinco que faltan, destruirás toda la ciudad?". Y le respondió el Señor: "No la destruiré, si encuentro allí cuarenta y cinco justos".
Abraham volvió a insistir: "Quizá no se encuentren allí más que cuarenta". El Señor le respondió: "En atención a los cuarenta, no lo haré". Abraham siguió insistiendo: "Que no se enoje mi Señor, si sigo hablando, ¿y si hubiera treinta?". El Señor le dijo: "No lo haré, si hay treinta".
Abraham insistió otra vez: "Ya que me he atrevido a hablar a mi Señor, ¿y si se encuentran sólo veinte?". El Señor respondió: "En atención a los veinte, no la destruiré".
Abraham continuó: "No se enoje mi Señor, hablaré sólo una vez más, ¿y si se encuentran sólo diez?". Contestó el Señor: "Por esos diez, no destruiré la ciudad". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
SALMO RESPONSORIAL
 
Del salmo 137, 1-2a. 2bcd-3. 6-7ab. 7c-8
R/. Te damos gracias de todo corazón.
 
De todo corazón te damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros ruegos. Te cantaremos delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo. R/.
 
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor; siempre que te invocamos, nos oíste y nos llenaste de valor. R/.
 
Se complace el Señor en los humildes y rechaza al engreído. En las penas, Señor, me infundes ánimo, me salvas del furor del enemigo. R/.
 
Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo y así concluirás en nosotros tu obra. Señor, tu amor perdura eternamente; obra tuya soy, no me abandones. R/.
 
 
SEGUNDA LECTURA
 
Les dio a ustedes una vida nueva con Cristo, perdonándoles todos sus pecados.
 
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 2, 12-14
 
Hermanos: Por el bautismo fueron ustedes sepultados con Cristo y también resucitaron con él, mediante la fe en el poder de Dios, que lo resucitó de entre los muertos.
Ustedes estaban muertos por sus pecados y no pertenecían al pueblo de la alianza. Pero él les dio una vida nueva con Cristo, perdonándoles todos los pecados. Él anuló el documento que nos era contrario, cuyas cláusulas nos condenaban, y lo eliminó clavándolo en la cruz de Cristo. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Rom 8, 15
R/. Aleluya, aleluya.
 
Hemos recibido un espíritu de hijos, que nos hace exclamar: ¡Padre! R/.
 
 
EVANGELIO
 
Pidan y se les dará.
 
Del santo Evangelio según san Lucas: 11, 1-13
 
Un día, Jesús estaba orando y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: "Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos".
Entonces Jesús les dijo: "Cuando oren, digan: 'Padre, santificado sea tu nombre, venga tu Reino, danos hoy nuestro pan de cada día y perdona nuestras ofensas, puesto que también nosotros perdonamos a todo aquel que nos ofende, y no nos dejes caer en tentación' ".
También les dijo: "Supongan que alguno de ustedes tiene un amigo que viene a medianoche a decirle: 'Préstame, por favor, tres panes, pues un amigo mío ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle'. Pero él le responde desde dentro: 'No me molestes. No puedo levantarme a dártelos, porque la puerta ya está cerrada y mis hijos y yo estamos acostados'. Si el otro sigue tocando, yo les aseguro que, aunque no se levante a dárselos por ser su amigo, sin embargo, por su molesta insistencia, sí se levantará y le dará cuanto necesite.
Así también les digo a ustedes: Pidan y se les dará, busquen y encontrarán, toquen y se les abrirá. Porque quien pide, recibe; quien busca, encuentra, y al que toca, se le abre. ¿Habrá entre ustedes algún padre que, cuando su hijo le pida pescado, le dé una víbora? ¿O cuando le pida huevo, le dé un alacrán? Pues, si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¿cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan?".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
 
 
PROFESIÓN DE FE
 
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
 
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.
 
 
PLEGARIA UNIVERSAL
 
Pidamos, hermanos, el auxilio del Espíritu Santo, para que inspire nuestras oraciones y ruegue con nosotros por las necesidades del mundo, respondiendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para los que empiezan a conocer a Cristo y desean la gracia del bautismo y para que los que preparan el bautismo de sus hijos, pidamos el favor de Dios todopoderoso.
 
Para nuestra ciudad (nuestro pueblo), para todos los que habitan en ella (él), y para todos los pueblos y naciones, pidamos al Señor paz y prosperidad abundantes.
 
Para los que persiguen a la Iglesia y para los pecadores que viven intranquilos, pidamos la luz del Espíritu y la gracia de la conversión.
 
Por los que estamos aquí reunidos y por aquellos por los que queremos rezar, pidamos al Señor que nos guarde a todos en la fe y nos reúna en el reino de su Hijo.
 
Escucha, Padre santo, la voz de tu Iglesia y haz que comprendamos el misterio de la oración filial que tu Hijo Jesús nos enseñó; danos tu Espíritu, para que, invocándote con aquella confianza y perseverancia que él nos enseñó, crezcamos más y más en la experiencia de tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
 
Recibe, Señor, los dones que por tu generosidad te presentamos, para que, por el poder de tu gracia, estos sagrados misterios santifiquen toda nuestra vida y nos conduzcan a la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
PREFACIO
 
Nuestra Humanidad salvada por la humanidad de Cristo
 
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios poderoso y eterno. Porque reconocemos como la obra de tu poder admirable no sólo haber socorrido nuestra débil naturaleza con la fuerza de tu divinidad, sino también el haber previsto el remedio de nuestra misma naturaleza mortal, y así con lo que fue la causa de nuestra ruina, con eso mismo nos diste la salvación, por Cristo, Señor nuestro. Por Él, los ángeles cantan con júbilo eterno y nosotros nos unimos a sus voces, cantando humildemente tu alabanza
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
 
 
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 102, 2
 
Bendice alma mía al Señor, y no te olvides de tus beneficios.
 
 
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
 
Habiendo recibido, Señor, el sacramento celestial, memorial perpetuo de la pasión de tu Hijo, concédenos que este don, que él mismo nos dio con tan inefable amor, nos aproveche para nuestra salvación eterna. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.
 

viernes, 15 de julio de 2022

DOMINGO XVI DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 17 de julio 2022



 
LA PALABRA DE DIOS ES VIVA


Gén 18,1-10; Sal 14; Col 1, 24-28; Lc 10,38-42
 
Nuestras lecturas ejemplifican una realidad que todos los lectores de la Biblia tenemos que enfrentar, el conflicto de las interpretaciones. La primera lectura ha sido interpretada como una revelación anticipada de la Trinidad, mientras que hoy algunos insisten en que adapta el mito antiguo de los dioses que circulan por el mundo para poner a prueba a los seres humanos. La segunda lectura ha generado la discusión sobre si realmente en ella se afirma que el sufrimiento de Cristo es defectuoso. El Evangelio ha sido interpretado como una instrucción acerca de la prioridad de escuchar la palabra de Dios, o como el establecimiento de dos formas fundamentales de vida cristiana (la contemplativa y la activa), o como la supresión del papel activo de la mujer en la comunidad de Lucas. Pero la Palabra de Dios es viva, ¡y genera controversias!
 
 
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 53. 6. 8
 
El Señor es mi auxilio y el único apoyo en mi vida. Te ofrece de corazón un sacrificio y daré gracias a tu nombre, Señor, porque eres bueno.
 
 
GLORIA
 
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
 
 
ORACIÓN COLECTA
 
Sé propicio, Señor, con tus siervos y multiplica, bondadoso, sobre ellos los dones de tu gracia, para que, fervorosos en la fe, la esperanza y la caridad, perseveren siempre fieles en el cumplimiento de tus mandatos.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
 
 
LITURGIA DE LA PALABRA
 
PRIMERA LECTURA
 
Señor, no pases junto a mí sin detenerte.
 
Del libro del Génesis: 18, 1-10
 
Un día, el Señor se le apareció a Abraham en el encinar de Mambré. Abraham estaba sentado en la entrada de su tienda, a la hora del calor más fuerte. Levantando la vista, vio de pronto a tres hombres que estaban de pie ante él. Al verlos, se dirigió a ellos rápidamente desde la puerta de la tienda, y postrado en tierra, dijo: "Señor mío, si he hallado gracia a tus ojos, te ruego que no pases junto a mí sin detenerte. Haré que traigan un poco de agua para que se laven los pies y descansen a la sombra de estos árboles; traeré pan para que recobren las fuerzas y después continuarán su camino, pues sin duda para eso han pasado junto a su siervo". Ellos le contestaron: "Está bien. Haz lo que dices". Abraham entró rápidamente en la tienda donde estaba Sara y le dijo: "Date prisa, toma tres medidas de harina, amásalas y cuece unos panes". Luego Abraham fue corriendo al establo, escogió un ternero y se lo dio a un criado para que lo matara y lo preparara. Cuando el ternero estuvo asado, tomó requesón y leche y lo sirvió todo a los forasteros. El permaneció de pie junto a ellos, bajo el árbol, mientras comían. Ellos le preguntaron: "¿Dónde está Sara, tu mujer?". Él respondió: ''Allá, en la tienda". Uno de ellos le dijo: "Dentro de un año volveré sin falta a visitarte por estas fechas; para entonces, Sara, tu mujer, habrá tenido un hijo".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
SALMO RESPONSORIAL
 
Del salmo 14, 2-3ab. 3cd-4ab. 5.
R/. ¿Quién será grato a tus ojos, Señor?
 
El hombre que procede honradamente y obra con justicia; el que es sincero en sus palabras y con su lengua a nadie desprestigia. R/.
 
Quien no hace mal al prójimo ni difama al vecino; quien no ve con aprecio a los malvados, pero honra a quienes temen al Altísimo. R/.
 
Quien presta sin usura y quien no acepta soborno en perjuicio de inocentes. Quienes vivan así serán gratos a Dios eternamente. R/.
 
 
SEGUNDA LECTURA
 
Un designio secreto que Dios ha mantenido oculto y que ahora ha revelado a su pueblo santo.
 
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 24-28
 
Hermanos: Ahora me alegro de sufrir por ustedes, porque así completo lo que falta a la pasión de Cristo en mí, por el bien de su cuerpo, que es la Iglesia. Por disposición de Dios, yo he sido constituido ministro de esta Iglesia para predicarles por entero su mensaje, o sea el designio secreto que Dios ha mantenido oculto desde siglos y generaciones y que ahora ha revelado a su pueblo santo. Dios ha querido dar a conocer a los suyos la gloria y riqueza que este designio encierra para los paganos, es decir, que Cristo vive en ustedes y es la esperanza de la gloria. Ese mismo Cristo es el que nosotros predicamos cuando corregimos a los hombres y los instruimos con todos los recursos de la sabiduría, a fin de que todos sean cristianos perfectos. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 8, 15
R/. Aleluya, aleluya.
 
Dichosos los que cumplen la palabra del Señor con un corazón bueno y sincero, y perseveran hasta dar fruto. R/.
 


EVANGELIO
 
Marta lo recibió en su casa. María escogió la mejor parte.
 
Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 38-42
 
En aquel tiempo, entró Jesús en un poblado, y una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa. Ella tenía una hermana, llamada María, la cual se sentó a los pies de Jesús y se puso a escuchar su palabra. Marta, entre tanto, se afanaba en diversos quehaceres, hasta que, acercándose a Jesús, le dijo: "Señor, ¿no te has dado cuenta de que mi hermana me ha dejado sola con todo el quehacer? Dile que me ayude".
El Señor le respondió: "Marta, Marta, muchas cosas te preocupan y te inquietan, siendo así que una sola es necesaria. María escogió la mejor parte y nadie se la quitará". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
 
 
PROFESIÓN DE FE
 
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
 
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.
 
 
PLEGARIA UNIVERSAL
 
Pidamos, hermanos, al Dios de la misericordia que auxilie nuestra pequeñez, para que podamos invocar su nombre con los sentimientos que él desea. Digamos confiadamente: Escúchanos, Señor. (R/. Escúchanos, Señor.)
 
Por la paz y la concordia de las Iglesias, por la unión de todos los cristianos y por la salvación de nuestras almas, roguemos al Señor.
 
Por los responsables de las naciones, para que bajo su gobierno tengamos una vida feliz y pacífica, roguemos al Señor.
 
Por los que están lejos de casa, por los enfermos y los encarcelados y por todos los que sufren, roguemos al Señor.
 
Por nuestra comunidad reunida en la fe, la piedad y el temor de Dios, por los que hacen el bien a nuestras parroquias y por los que ayudan a los pobres, roguemos al Señor.
 
Dios de bondad, Padre santo, escucha nuestras oraciones y danos un corazón humilde y sencillo que escuche la palabra de tu Hijo y lo acoja en la persona de nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
 
Dios nuestro, que con la perfección de un único sacrificio pusiste fin a la diversidad de sacrificios de la antigua ley, recibe las ofrendas de tus fieles, y santifícalas como bendijiste la ofrenda de Abel, para que aquello que cada uno te ofrece en honor de tu gloria, sea de provecho para la salvación de todos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
PREFACIO
 
El Misterio de la salvación
 
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, compadecido del extravío de los hombres, quiso nacer de la Virgen María; muriendo en la cruz, nos libró de la muerte eterna y, resucitando, nos dio vida eterna. Por eso, con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo,
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.
 
 
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 110, 4-5
 
Ha hecho maravillas memorables, el Señor es piadoso y clemente; él da alimento a sus fieles.
 
 
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
 
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor. 

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220717

 

La lectura de la Biblia siempre suscita controversias. En la antigüedad, algunos extirparon ciertos libros de la Biblia por ser "materiales". En la Edad Media, el simbolismo, como se presenta en el Libro de Apocalipsis, ha sido debatido. El uso de las disciplinas históricas en los siglos XVIII y XIX ha puesto en cuestión la credibilidad histórica de la Escritura. En nuestros días, varios métodos de interpretación han sido controvertidos, como el posmoderno, la teología de la liberación, el feminista, y el africano. Para dialogar con este mar turbulento, podemos acudir a dos salvavidas: la armonía entre la fe (la Biblia) y la razón (la interpretación); y la convicción de que, como lo expresó el Vaticano II, "los libros de la Escritura enseñan ... con fidelidad y sin error, la verdad que Dios quiso consignar en las sagradas letras para nuestra salvación" (Dei Verbum n. 11).

sábado, 9 de julio de 2022

DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 10 de julio 2022


EL BUEN SAMARITANO

 
Deut 30, 10-14; Sal 68; Col 1, 15-20; Lc 10, 25-37
 
En Lucas, el letrado plantea su pregunta en términos de religiosidad deuteronómica: para vivir bien en este mundo, hay que cumplir (Deut 4, 1); pero cambia el horizonte a la vida eterna y al mundo nuevo. Jesús hace que responda el que pregunta. El letrado lo escucha como reproche y busca una escapatoria; se focaliza en el término "prójimo" e intenta establecer una discusión casuística sobre él. Para Jesús, en cambio, no hay escapatoria. En vez de discutir, narra una parábola con dos facetas: urge la misericordia, sobre todo respecto a los necesitados; e incluye que la gente no judía, simbolizada por el samaritano, pueda cumplir la ley y entrar en la vida eterna. No es de extrañar que, después de que Jesús emite el imperativo de "ir y hacer lo mismo" (v. 37), la respuesta del letrado es el silencio.
 


ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 16, 15
 
Por serte fiel, yo contemplaré tu rostro, Señor, y al despertar, espero saciarme de gloria.
 
 
ORACIÓN COLECTA
 
Señor Dios, que muestras la luz de tu verdad a los que andan extraviados para que puedan volver al buen camino, concede a cuantos se profesan como cristianos rechazar lo que sea contrario al nombre que llevan y cumplir lo que ese nombre significa. Por nuestro Señor Jesucristo ...
 
 
GLORIA
 
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
 
 
LITURGIA DE LA PALABRA
 
PRIMERA LECTURA
 
Los mandamientos están muy a tu alcance para que puedas cumplirlos.
 
Del libro del Deuteronomio: 30, 10-14
 
En aquellos días, habló Moisés al pueblo y le dijo: "Escucha la voz del Señor, tu Dios, que te manda guardar sus mandamientos y disposiciones escritos en el libro de esta ley. Y conviértete al Señor tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma.
Estos mandamientos que te doy no son superiores a tus fuerzas ni están fuera de tu alcance. No están en el cielo, de modo que pudieras decir: '¿Quién subirá por nosotros al cielo para que nos los traiga, los escuchemos y podamos cumplirlos?'. Ni tampoco están al otro lado del mar, de modo que pudieras objetar: '¿Quién cruzará el mar por nosotros para que nos los traiga, los escuchemos y podamos cumplirlos?'. Por el contrario, todos mis mandamientos están muy a tu alcance, en tu boca y en tu corazón, para que puedas cumplirlos". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
SALMO RESPONSORIAL
 
Del salmo 68, 14.17. 30-31. 33-34. 36ab. 37.
R/. Escúchame, Señor, porque eres bueno.
 
A ti, Señor, elevo mi plegaria, ven en mi ayuda pronto; escúchame conforme a tu demencia, Dios fiel en el socorro. Escúchame, Señor, pues eres bueno y en tu ternura vuelve a mí tus ojos. R/.
 
Mírame enfermo y afligido; defiéndeme y ayúdame, Dios mío. En mi cantar exaltaré tu nombre, proclamaré tu gloria, agradecido. R/.
 
Se alegrarán al verlo los que sufren; quienes buscan a Dios tendrán más ánimo, porque el Señor jamás desoye al pobre ni olvida al que se encuentra encadenado. R/.
 
Ciertamente el Señor salvará a Sión, reconstruirá a Judá; la heredarán los hijos de sus siervos, quienes aman a Dios la habitarán. R/.
 
 
SEGUNDA LECTURA
 
Todo fue creado por medio de él y para él.
 
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 15-20
 
Cristo es la imagen de Dios invisible, el primogénito de toda la creación, porque en él tienen su fundamento todas las cosas creadas, del cielo y de la tierra, las visibles y las invisibles, sin excluir a los tronos y dominaciones, a los principados y potestades. Todo fue creado por medio de él y para él.
Él existe antes que todas las cosas, y todas tienen su consistencia en él. Él es también la cabeza del cuerpo, que es la Iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que sea el primero en todo.
Porque Dios quiso que en Cristo habitara toda plenitud y por él quiso reconciliar consigo todas las cosas, del cielo y de la tierra, y darles la paz por medio de su sangre, derramada en la cruz. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 63.68
R/. Aleluya, aleluya.
 
Tus palabras, Señor, son espíritu y vida. Tú tienes palabras de vida eterna. R/.
 
 
EVANGELIO
 
¿Quién es mi prójimo?
 
Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 25-37
 
En aquel tiempo, se presentó ante Jesús un doctor de la ley para ponerlo a prueba y le preguntó: "Maestro, ¿qué debo hacer para conseguir la vida eterna?". Jesús le dijo: "¿Qué es lo que está escrito en la ley? ¿Qué lees en ella?". El doctor de la ley contestó: "Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu ser, y a tu prójimo como a ti mismo". Jesús le dijo: "Has contestado bien; si haces eso, vivirás".
El doctor de la ley, para justificarse, le preguntó a Jesús: "¿Y quién es mi prójimo?". Jesús le dijo: "Un hombre que bajaba por el camino de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos ladrones, los cuales lo robaron, lo hirieron y lo dejaron medio muerto. Sucedió que por el mismo camino bajaba un sacerdote, el cual lo vio y pasó de largo. De igual modo, un levita que pasó por ahí, lo vio y siguió adelante. Pero un samaritano que iba de viaje, al verlo, se compadeció de él, se le acercó, ungió sus heridas con aceite y vino y se las vendó; luego lo puso sobre su cabalgadura, lo llevó a un mesón y cuidó de él. Al día siguiente sacó dos denarios, se los dio al dueño del mesón y le dijo: 'Cuida de él y lo que gastes de más, te lo pagaré a mi regreso'. ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del hombre que fue asaltado por los ladrones?". El doctor de la ley le respondió: "El que tuvo compasión de él". Entonces Jesús le dijo: "Anda y haz tú lo mismo". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
 
 
PROFESIÓN DE FE
 
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
 
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.
 
 
PLEGARIA UNIVERSAL
 
Que nuestras oraciones lleguen, hermanos, a la presencia del Señor y que nuestros ruegos sean escuchados por aquel que escruta el corazón de todos. Digamos confiadamente: Escúchanos, Señor. (R/. Escúchanos, Señor.)
 
Pidamos la sabiduría del Hijo de Dios para los que proclaman con fidelidad la palabra divina y para todos los ministros que sirven a la Iglesia. Roguemos al Señor.
 
Por Israel, el pueblo de la antigua alianza, por los cristianos separados de la Iglesia católica y apostólica y por los que no conocen al Dios verdadero, invoquemos al Señor, dueño de toda verdad.
 
Por los que viven lejos de su casa, por los encarcelados, por los débiles y oprimidos, y por los justos que sufren persecución, oremos a Jesús el Salvador.
 
Invoquemos con fe y devoción al Señor de la gloria por la paz y felicidad de los que ahora estamos aquí, huéspedes en la casa del Señor. Roguemos al Señor.
 
Dios misericordioso y omnipotente, que has querido resumir todos los preceptos de tu ley en el mandamiento del amor, escucha nuestras oraciones y danos un corazón solícito y generoso hacia los sufrimientos de nuestros hermanos, a imagen de tu Hijo, el buen samaritano del mundo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
 
 
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
 
Mira, Señor, los dones de tu Iglesia suplicante, y concede que, al recibirlos, sirvan a tus fieles para crecer en santidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
PREFACIO
 
Nuestra Humanidad salvada por la humanidad de Cristo
 
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios poderoso y eterno. Porque reconocemos como la obra de tu poder admirable no sólo haber socorrido nuestra débil naturaleza con la fuerza de tu divinidad, sino también el haber previsto el remedio de nuestra misma naturaleza mortal, y así con lo que fue la causa de nuestra ruina, con eso mismo nos diste la salvación, por Cristo, Señor nuestro. Por Él, los ángeles cantan con júbilo eterno y nosotros nos unimos a sus voces, cantando humildemente tu alabanza
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
 
 
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr Sal 83, 4-5
 
El gorrión ha encontrado una casa, y la golondrina un nido donde poner sus polluelos: junto a tus altares, Señor de los ejércitos, Rey mío y Dios mío. Dichosos los que viven en tu casa y pueden alabarte siempre.
 
 
ORACIÓN DESPUES DE LA COMUNIÓN
 
Alimentados con los dones que hemos recibido, te suplicamos, Señor, que, participando frecuentemente de este sacramento, crezcan los efectos de nuestra salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor. 

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220710

 

La parábola del buen samaritano ha dejado su huella en nuestro mundo a lo largo de los siglos. Era un tema popular en las vidrieras de las catedrales medievales, como los de Chartres, Bourgos, y Sens en Francia. Pintores como Rembrandt Van Rijn (1606-1669), Eugene Delacroix (1798-1863), Vicente Van Gogh (1853-1890) han producido obras maestras interpretándola. También ha llamado la atención del Papa Francisco, quien la ha asumido como un elemento central en su ministerio papal. En el segundo capítulo de su encíclica Fratelli tutti: sobre la fraternidad y la amistad social, medita sobre los personajes de la parábola y pregunta a cada uno de nosotros: "¿Con quién te identificas? Esta pregunta es cruda, directa, y determinante" (n. 64). En ese momento cuando podamos responder honestamente que con "el samaritano", nos convertiremos en rayos de luz en medio de las sombras de nuestro mundo cerrado.

viernes, 1 de julio de 2022

DOMINGO XIV DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 3 de julio 2022

 


EL SENTIDO MISIONERO DEL DISCIPULADO
Is 66, 10-14; Sal 65; Gál 6, 14-18; Lc 10, 1-12. 17-20
 
En el capítulo 10 de Lucas, Jesús continúa esas instrucciones para la vida de sus discípulos que ha empezado en el capítulo anterior. Quizá esperaríamos que tales instrucciones se concentraran en la necesidad de ejercer cierta precaución, de no fiarse de los demás, y de evitar lo que Jesús probablemente sabía que iba a ser su propio destino violento. Sin embargo, este capítulo dista mucho de cualquier preocupación por la autopreservación. Al contrario, Jesús insiste en que sus seguidores dejen la tranquilidad de sus vidas cerradas y compartan el Evangelio con todo el mundo, como es sugerido por el número de setenta y dos que recuerda el número de las naciones enumeradas en Gén 10,2-31. Los manda con un sentido de urgencia, a pesar de la hostilidad que van a encontrar. La vida cristiana tiene un sentido imprescindible de misión.
 
 
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 47. 10-11
 
Meditamos, Señor, los dones de tu amor, en medio de tu templo. Tu alabanza llega hasta los confines de la tierra como tu fama. Tu diestra está llena de justicia.
 
 
GLORIA
 
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
 
 
ORACIÓN COLECTA
 
Señor Dios, que por medio de la humillación de tu Hijo reconstruiste el mundo derrumbado, concede a tus fieles una santa alegría, para que, a quienes rescataste de la esclavitud del pecado, nos hagas disfrutar del gozo que no tiene fin. Por nuestro Señor Jesucristo ...
 
 
LITURGIA DE LA PALABRA
 
PRIMERA LECTURA
 
Yo haré correr la paz sobre ella como un río.
 
Del libro del profeta Isaías: 66, 10-14
 
Alégrense con Jerusalén, gocen con ella todos los que la aman, alégrense de su alegría todos los que por ella llevaron luto, para que se alimenten de sus pechos, se llenen de sus consuelos y se deleiten con la abundancia de su gloria.
Porque dice el Señor: "Yo haré correr la paz sobre ella como un río y la gloria de las naciones como un torrente desbordado. Como niños serán llevados en el regazo y acariciados sobre sus rodillas; como un hijo a quien su madre consuela, así los consolaré yo. En Jerusalén serán ustedes consolados.
Al ver esto se alegrará su corazón y sus huesos florecerán como un prado. Y los siervos del Señor conocerán su poder". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
SALMO RESPONSORIAL
 
Del salmo 65, 1-3a. 4-5. 6-7a. 16. 20.
R/. Las obras del Señor son admirables.
 
Que aclame al Señor toda la tierra; celebremos su gloria y su poder, cantemos un himno de alabanza, digamos al Señor: "Tu obra es admirable". R/.
 
Que se postre ante ti la tierra entera y celebre con cánticos tu nombre. Admiremos las obras del Señor, los prodigios que ha hecho por los hombres. R/.
 
El transformó el Mar Rojo en tierra firme y los hizo cruzar el Jordán a pie enjuto. Llenémonos por eso de gozo y gratitud: El Señor es eterno y poderoso. R/.
 
Cuantos temen a Dios vengan y escuchen, y les diré lo que ha hecho por mí. Bendito sea Dios que no rechazó mi súplica, ni me retiró su gracia. R/.
 
 
SEGUNDA LECTURA
 
Llevo en mi cuerpo la marca de los sufrimientos que he pasado por Cristo.
 
De la carta del apóstol san Pablo a los gálatas: 6, 14-18
 
Hermanos: No permita Dios que yo me gloríe en algo que no sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo está crucificado para mí y yo para el mundo. Porque en Cristo Jesús de nada vale el estar circuncidado o no, sino el ser una nueva creatura.
Para todos los que vivan conforme a esta norma y también para el verdadero Israel, la paz y la misericordia de Dios. De ahora en adelante, que nadie me ponga más obstáculos, porque llevo en mi cuerpo la marca de los sufrimientos que he pasado por Cristo.
Hermanos, que la gracia de nuestro Señor Jesucristo esté con ustedes. Amén. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Col 3, 15. 16
R/. Aleluya, aleluya.
 
Que en sus corazones reine la paz de Cristo; que la palabra de Cristo habite en ustedes con toda su riqueza. R/.
 
 
EVANGELIO
 
El deseo de paz de ustedes se cumplirá.
 
Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 1-12. 17-20
 
En aquel tiempo, Jesús designó a otros setenta y dos discípulos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares a donde pensaba ir, y les dijo: "La cosecha es mucha y los trabajadores pocos. Rueguen, por lo tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos. Pónganse en camino; yo los envío como corderos en medio de lobos. No lleven ni dinero, ni morral, ni sandalias y no se detengan a saludar a nadie por el camino. Cuando entren en una casa digan: 'Que la paz reine en esta casa'. Y si allí hay gente amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá; si no, no se cumplirá. Quédense en esa casa. Coman y beban de lo que tengan, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de casa en casa. En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman lo que les den. Curen a los enfermos que haya y díganles: 'Ya se acerca a ustedes el Reino de Dios'.
Pero si entran en una ciudad y no los reciben, salgan por las calles y digan: 'Hasta el polvo de esta ciudad que se nos ha pegado a los pies nos lo sacudimos, en señal de protesta contra ustedes. De todos modos, sepan que el Reino de Dios está cerca'. Yo les digo que, en el día del juicio, Sodoma será tratada con menos rigor que esa ciudad".
Los setenta y dos discípulos regresaron llenos de alegría y le dijeron a Jesús: "Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre".
Él les contestó: "Vi a Satanás caer del cielo como el rayo. A ustedes les he dado poder para aplastar serpientes y escorpiones y para vencer toda la fuerza del enemigo, y nada les podrá hacer daño. Pero no se alegren de que los demonios se les someten. Alégrense más bien de que sus nombres están escritos en el cielo".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
 
 
PROFESIÓN DE FE
 
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
 
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.
 
 
PLEGARIA UNIVERSAL
 
Pidamos, hermanos, al Señor que escuche nuestras súplicas y acoja nuestras peticiones. Digamos confiadamente: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
 
Oremos a Dios Padre por el Papa Francisco, por nuestro obispo N., y por todos aquellos a los que se han confiado nuestras almas; que nuestro Señor les dé la fuerza y sabiduría para dirigir y gobernar santamente las comunidades que les han sido encomendadas y puedan así dar buena cuenta cuando se les pida. Roguemos al Señor.
 
Oremos también para que Dios nos conceda la paz; que él, que es la verdadera paz y el origen de toda concordia, transmita la paz del cielo a la tierra, la paz espiritual para nuestras almas y la paz temporal para nuestros días. Roguemos al Señor.
 
Pidamos por los que se esfuerzan en seguir las sendas del Evangelio, para que nuestro Señor los mantenga en este santo propósito hasta el fin de sus días; oremos también por los que viven en pecado, para que nuestro Señor les dé la gracia de convertirse, hacer penitencia y purificarse en el sacramento del perdón y alcanzar así la salvación eterna. Roguemos al Señor.
 
Oremos, finalmente, a Dios nuestro Señor por los fieles difuntos, que han salido ya de este mundo, especialmente por nuestros familiares, amigos y bienhechores, para que el Señor, por su gran misericordia, los reciba en su gloria y los coloque entre los santos y elegidos. Roguemos al Señor.
 
Dios nuestro, que al darnos la vocación cristiana nos pides estar siempre dispuestos a anunciar el Evangelio por todo el mundo, escucha nuestras oraciones y concédenos aquella valentía y libertad apostólicas que son necesarias para hacer presente en el mundo tu palabra de amor y tu mensaje de paz. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
 
La oblación que te ofrecemos, Señor, nos purifique, y nos haga participar, de día en día, de la vida del reino glorioso. Por Jesucristo, nuestro Señor.
 
 
PREFACIO
 
El Misterio de la salvación
 
 
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, compadecido del extravío de los hombres, quiso nacer de la Virgen María; muriendo en la cruz, nos libró de la muerte eterna y, resucitando, nos dio vida eterna. Por eso, con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo,
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.
 
 
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 33,9
 
Prueben y vean qué bueno es el Señor; dichoso quien se acoge a él.
 
 
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
 
Señor, que nos has colmado con tantas gracias, concédenos alcanzar los dones de la salvación y que nunca dejemos de alabarte. Por Jesucristo, nuestro Señor.