(San Basilio Magno [329-379]. Homilía 6, sobre las
riquezas).
Remar Mar Adentro, pretende, como laicos comprometidos, presentar temas de reflexión para vivir el reino de Dios; levantando las anclas en una tarea asumida generosamente. Ricardo Huante Magaña
sábado, 30 de julio de 2022
EN COMUNIÓN CON LA TRADICIÓN VIVA DE LA IGLESIA Domingo 31 de julio 2022
Domingo XVIII del Tiempo Ordinario Ciclo C Domingo 31 de julio 2022
¿QUÉ BIENES BUSCAMOS?
Ecli, 1,2; 2, 21-23; Sal 89; Col 3, 1-5. 9-11; Lc 12,13-21
Lucas empieza una larga meditación sobre los graves peligros que
corremos cuando anhelamos los bienes materiales. En nuestro texto, se focaliza
el vicio de la avaricia ejemplificado por la parábola de un hombre rico. A
primera vista, este hombre no parece tan malo, sino simplemente prudente. Tiene
una gran cosecha y quiere construir graneros suficientes para guardarla, lo
cual parece sensato. Sin embargo, su frecuente uso de las palabras
"yo" y "mío" sugiere que no es tan prudente. Al contrario,
es egoísta, codicioso, avaro: en una palabra, es insensato. Quiere todo para sí
mismo y pretende hallar su seguridad en sus riquezas. No reconoce, como lo
expresa nuestra lectura del Eclesiastés, que toda riqueza es
"vanidad", en hebreo hebel o vapor insubstancial. El antídoto contra
tal avaricia sugiere la Carta a los colosenses, es buscar los bienes de arriba.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 69, 2. 6
Dios mío, ven en mi ayuda; Señor, date prisa en socorrerme. Tú eres mi
auxilio y mi salvación; Señor, no tardes.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado
del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende
nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
ORACIÓN COLECTA
Ayuda, Señor, a tus siervos, que imploran tu continua benevolencia, y
ya que se glorían de tenerte como su creador y su guía, renueva en ellos tu
obra creadora y consérvales los dones de tu redención. Por nuestro Señor
Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
¿Qué provecho saca el hombre de todos sus trabajos?
Del Eclesiastés (Cohélet): 1,2; 2, 21-23
Todas las cosas, absolutamente todas, son vana ilusión. Hay quien se
agota trabajando y pone en ello todo su talento, su ciencia y su habilidad, y
tiene que dejárselo todo a otro que no lo trabajó. Esto es vana ilusión y gran
desventura. En efecto, ¿qué provecho saca el hombre de todos sus trabajos y
afanes bajo el sol? De día dolores, penas y fatigas; de noche no descansa. ¿No
es también eso vana ilusión? Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 89, 3-4. 5-6. 12-13. 14. 17.
R/. Señor, ten compasión de nosotros.
Tú haces volver al polvo a los humanos, diciendo a los mortales que
retornen. Mil años son para ti como un día, que ya pasó; como una breve noche.
R/.
Nuestra vida es tan breve como un sueño; semejante a la hierba, que
despunta y florece en la mañana y por la tarde se marchita y se seca. R/.
Enséñanos a ver lo que es la vida y seremos sensatos. ¿Hasta cuándo, Señor,
¿vas a tener compasión de tus siervos? ¿Hasta cuándo? R/.
Llénanos de tu amor por la mañana y júbilo será la vida toda. Que el
Señor bondadoso nos ayude y dé prosperidad a nuestras obras. R/.
SEGUNDA LECTURA
Busquen los bienes de arriba, donde está Cristo.
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 3, 1-5. 9-11
Hermanos: Puesto que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de
arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios. Pongan todo el corazón
en los bienes del cielo, no en los de la tierra, porque han muerto y su vida
está escondida con Cristo en Dios. Cuando se manifieste Cristo, vida de
ustedes, entonces también ustedes se manifestarán gloriosos juntamente con él.
Den muerte, pues, a todo lo malo que hay en ustedes: la fornicación, la
impureza, las pasiones desordenadas, los malos deseos y la avaricia, que es una
forma de idolatría. No sigan engañándose unos a otros; despójense del modo de
actuar del viejo yo y revístanse del nuevo yo, el que se va renovando conforme
va adquiriendo el conocimiento de Dios, que lo creó a su propia imagen.
En este orden nuevo ya no hay distinción entre judíos y no judíos,
israelitas y paganos, bárbaros y extranjeros, esclavos y libres, sino que
Cristo es todo en todos.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 5, 3
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los
cielos. R/.
EVANGELIO
¿Para quién serán todos tus bienes?
Del santo Evangelio según san Lucas: 12, 13-21
En aquel tiempo, hallándose Jesús en medio de una multitud, un hombre
le dijo: "Maestro, dile a mi hermano' que comparta conmigo la
herencia". Pero Jesús le contestó: "Amigo, ¿quién me ha puesto como
juez en la distribución de herencias?". Y dirigiéndose a la multitud,
dijo: "Eviten toda clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende
de la abundancia de los bienes que posea". Después les propuso esta
parábola: "Un hombre rico obtuvo una gran cosecha y se puso a pensar:
'¿Qué haré, porque no tengo ya en dónde almacenar la cosecha? Ya sé lo que voy
a hacer: derribaré mis graneros y construiré otros más grandes para guardar ahí
mi cosecha y todo lo que tengo. Entonces podré decirme: Ya tienes bienes
acumulados para muchos años; descansa, come, bebe y date a la buena vida'. Pero
Dios le dijo: '¡Insensato! Esta misma noche vas a morir. ¿Para quién serán
todos tus bienes?'. Lo mismo le pasa al que amontona riquezas para sí mismo y
no se hace rico de lo que vale ante Dios". Palabra del Señor. Gloria a ti,
Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Invoquemos, hermanos, a Dios Padre, pidámosle que escuche nuestras
oraciones y roguémosle con fe que venga en auxilio de nuestras necesidades,
digamos confiadamente: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Oremos por el Papa Francisco, por nuestro obispo N., por todos los
obispos y sacerdotes, para que el Señor los haga santos y les conceda el
espíritu de sabiduría a fin de que proclamen con rectitud la verdadera palabra.
Roguemos al Señor.
Oremos por los que están lejos de sus hogares, por los viajeros, por
los que se encuentran en peligro, para que el Señor les conceda un ángel que
los proteja y los aleje de todo mal.
Oremos por los hombres de todos los pueblos y de todas las religiones,
para que el Señor les revele su bondad y dirija su camino hacia el conocimiento
de la verdad plena. Roguemos al Señor.
Oremos por nuestros hermanos que han muerto en el Señor; que Dios
perdone sus pecados, acoja sus almas junto a él y los conduzca al lugar del
descanso, de la luz y de la paz. Roguemos al Señor.
Dios nuestro, principio y fin de todas las cosas, que, en Cristo, tu
Hijo, nos has llamado a la posesión de tu reino, escucha nuestras oraciones y
no permitas que, mientras nos esforzamos por someter la tierra, nos dejemos
cautivar por el deseo de poseer los bienes terrenales, y nos olvidemos de
buscar siempre y por encima de todo aquello que nos hace ricos a tus ojos. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación
este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
El Misterio Pascual y el Pueblo de Dios
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación
darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, por su Misterio
Pascual, realizó la obra maravillosa de llamamos de la esclavitud del pecado y
de la muerte al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación
consagrada, pueblo de tu propiedad, para que, trasladados por ti de las
tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas. Por eso
con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos
sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sb 16, 20
Nos has enviado, Señor, pan del cielo, que encierra en sí toda delicia,
y satisface todos los gustos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Acompaña, Señor, con tu permanente auxilio, a quienes renuevas con el
don celestial, y a quienes no dejas de proteger, concédeles ser cada vez más
dignos de la eterna redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220731
Uno de los problemas más apremiantes de nuestra época moderna es la falta de seguridad espiritual. Los modernos nos encontramos desvinculados de la sociedad, del medio ambiente, y hasta de Dios. Nos sentimos abandonados a los azares de la suerte y privados de puntos de referencia ciertos. Varios pensadores, como el filósofo Martín Heidegger (1889-1976) o el teólogo luterano Rudolf Bultmann (1884-1976), han dedicado tomos pesados a esta situación, dándonos algunas ideas importantes y útiles. Pero nosotros nos apoyamos en la Biblia que contiene enseñanzas extensas sobre la búsqueda de la seguridad. Mientras que la tendencia humana es hallar seguridad en los ídolos, que son los bienes materiales y que agarramos como si fueran salvavidas, la Biblia enfatiza que la seguridad se encuentra solo en el abandono confiado a él que no podemos agarrar ni ver ni controlar, es decir, Dios.
sábado, 23 de julio de 2022
EN COMUNIÓN CON LA TRADICIÓN VIVA DE LA IGLESIA 20220724
Domingo 24 de julio 2022
«Señor, enséñanos a orar». ¿Creéis, hermanos, que Dios no sabe lo que os es necesario? El I que conoce nuestro desamparo, conoce anticipadamente nuestros deseos. Por eso, cuando el Señor enseñó el Padrenuestro, recomendó a sus discípulos a ser sobrios en palabras: Cuando oréis, no usen muchas palabras como los paganos, pues vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes que se lo pidan (Mt 6, 7-8). Si nuestro Padre sabe lo que nos hace falta ¿por qué decírselo, aunque sea en pocas palabras? Señor, si tú lo sabes, ¿es necesario orar? Ahora bien, el que aquí nos dice: No usen muchas palabras en vuestras oraciones, nos dice en otra parte: Pedid y recibirán, y para que nadie crea que lo dice como de paso, en otra parte añade: Buscad y hallaréis, y para que nadie piense que es una simple manera de hablar, observen cómo termina: Toquen y se os abrirá (Mt 7, 7). Quiere, pues, el Señor que, para recibir, primero pidas, que para hallar primero te pongas a buscar, y en fin, para entrar no dejes de llamar. ¿Para qué pedir? ¿Para qué buscar? ¿Para qué llamar? ¿Para qué cansamos orando, buscando, llamando como para hacer saber al que ya lo sabe todo? E incluso leemos en otra parte: Es preciso orar sin parar, sin cansarse (Le 18, 1). Pues bien, para aclarar este misterio ¡pide, busca, llama! Si el Señor cubre de velos este misterio, es que quiere que te ejercites en buscar y encontrar tú mismo la explicación. Todos nosotros debemos alentamos mutuamente a orar»
(San Agustín [354-430). Sermón 80).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220724
La oración cristiana nunca debe ser una huida de la vida humana.
Aunque provee momentos de descanso, consolación, y refugio durante el ajetreo
que es la vida cotidiana, nunca debe ser una fuga de todo lo que es humano. Por
un lado, durante la oración debemos llevar nuestra vida cotidiana -sus
esperanzas, sus angustias, y sus alegrías a Dios, y ofrecérsela como un
sacrificio agradable. Por otro lado, debemos volver a nuestra vida cotidiana,
renovados y vigorizados para vivir más fielmente la existencia de cada día. En
breve, la oración es un ejemplo de lo que el Concilio Vaticano II enseñó sobre
la liturgia, aunque no es siempre litúrgica: es "la cumbre a la cual
tiende la actividad de la Iglesia y al mismo tiempo la fuente de donde mana
toda su fuerza"
(Sacrosanctum concilium n. 10).
DOMINGO XVII DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 24 de julio 2022
LA ORACIÓN Y LA VIDA HUMANA
Gén 18,20-32; Sal 137; Co12, 12-14; Lc 11,1-13
En nuestras lecturas, la oración tiene una relación clara con la vida
humana. En Génesis, la oración de Abrahán es una especie de regateo con Dios
acerca de la vida de los justos en Sodoma. En la Carta a los colosenses, el
autor relaciona el bautismo con la vida nueva en Cristo. En Lucas, Jesús enseña
el Padre Nuestro, una oración que consolida su vida y ministerio en unos versos
densos. Por ejemplo, se dirige al Padre, a quien Jesús invoca a lo largo de su
vida. Anhela que "venga tu Reino" (v. 2), ese Reino que era el meollo
de la predicación de Cristo. Pide que "no nos dejes caer en
tentación" (v. 4), porque Jesús sufrió las tentaciones del Maligno al
inicio de su ministerio (Lc 4, 1-13). La oración y la vida se relacionan
estrechamente en la Sagrada Escritura.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 67, 6. 7.36
Dios habita en su santuario; él nos hace habitar juntos en su casa; es
la fuerza y el poder de su pueblo.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado
del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende
nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, protector de los que en ti confían, sin ti, nada es fuerte,
ni santo; multiplica sobre nosotros tu misericordia para que, bajo tu
dirección, de tal modo nos sirvamos ahora de los bienes pasajeros, que nuestro
corazón esté puesto en los bienes eternos. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
No se enfade mi Señor, si sigo hablando.
Del libro del Génesis: 18, 20-32
En aquellos días, el Señor dijo a Abraham: "El clamor contra
Sodoma y Gomorra es grande y su pecado es demasiado grave. Bajaré, pues, a ver
si sus hechos corresponden a ese clamor; y si no, lo sabré". Los hombres
que estaban con Abraham se despidieron de él y se encaminaron hacia Sodoma.
Abraham se quedó ante el Señor y le preguntó: "¿Será posible que tú
destruyas al inocente junto con el culpable? Supongamos que hay cincuenta
justos en la ciudad, ¿acabarás con todos ellos y no perdonarás al lugar en
atención a esos cincuenta justos? Lejos de ti tal cosa: matar al inocente junto
con el culpable, de manera que la suerte del justo sea como la del malvado; eso
no puede ser. E1juez de todo el mundo ¿no hará justicia?". El Señor le
contestó: "Si encuentro en Sodoma cincuenta justos, perdonaré a toda la
ciudad en atención a ellos".
Abraham insistió: "Me he atrevido a hablar a mi Señor, yo que soy
polvo y ceniza. Supongamos que faltan cinco para los cincuenta justos, ¿por
esos cinco que faltan, destruirás toda la ciudad?". Y le respondió el
Señor: "No la destruiré, si encuentro allí cuarenta y cinco justos".
Abraham volvió a insistir: "Quizá no se encuentren allí más que
cuarenta". El Señor le respondió: "En atención a los cuarenta, no lo
haré". Abraham siguió insistiendo: "Que no se enoje mi Señor, si sigo
hablando, ¿y si hubiera treinta?". El Señor le dijo: "No lo haré, si
hay treinta".
Abraham insistió otra vez: "Ya que me he atrevido a hablar a mi
Señor, ¿y si se encuentran sólo veinte?". El Señor respondió: "En
atención a los veinte, no la destruiré".
Abraham continuó: "No se enoje mi Señor, hablaré sólo una vez más,
¿y si se encuentran sólo diez?". Contestó el Señor: "Por esos diez,
no destruiré la ciudad". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 137, 1-2a. 2bcd-3. 6-7ab. 7c-8
R/. Te damos gracias de todo corazón.
De todo corazón te damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros
ruegos. Te cantaremos delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo. R/.
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor; siempre que te
invocamos, nos oíste y nos llenaste de valor. R/.
Se complace el Señor en los humildes y rechaza al engreído. En las
penas, Señor, me infundes ánimo, me salvas del furor del enemigo. R/.
Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo y así concluirás en nosotros tu
obra. Señor, tu amor perdura eternamente; obra tuya soy, no me abandones. R/.
SEGUNDA LECTURA
Les dio a ustedes una vida nueva con Cristo, perdonándoles todos sus
pecados.
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 2, 12-14
Hermanos: Por el bautismo fueron ustedes sepultados con Cristo y también
resucitaron con él, mediante la fe en el poder de Dios, que lo resucitó de
entre los muertos.
Ustedes estaban muertos por sus pecados y no pertenecían al pueblo de
la alianza. Pero él les dio una vida nueva con Cristo, perdonándoles todos los
pecados. Él anuló el documento que nos era contrario, cuyas cláusulas nos
condenaban, y lo eliminó clavándolo en la cruz de Cristo. Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Rom 8, 15
R/. Aleluya, aleluya.
Hemos recibido un espíritu de hijos, que nos hace exclamar: ¡Padre! R/.
EVANGELIO
Pidan y se les dará.
Del santo Evangelio según san Lucas: 11, 1-13
Un día, Jesús estaba orando y cuando terminó, uno de sus discípulos le
dijo: "Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos".
Entonces Jesús les dijo: "Cuando oren, digan: 'Padre, santificado
sea tu nombre, venga tu Reino, danos hoy nuestro pan de cada día y perdona
nuestras ofensas, puesto que también nosotros perdonamos a todo aquel que nos
ofende, y no nos dejes caer en tentación' ".
También les dijo: "Supongan que alguno de ustedes tiene un amigo
que viene a medianoche a decirle: 'Préstame, por favor, tres panes, pues un
amigo mío ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle'. Pero él le
responde desde dentro: 'No me molestes. No puedo levantarme a dártelos, porque
la puerta ya está cerrada y mis hijos y yo estamos acostados'. Si el otro sigue
tocando, yo les aseguro que, aunque no se levante a dárselos por ser su amigo,
sin embargo, por su molesta insistencia, sí se levantará y le dará cuanto
necesite.
Así también les digo a ustedes: Pidan y se les dará, busquen y
encontrarán, toquen y se les abrirá. Porque quien pide, recibe; quien busca,
encuentra, y al que toca, se le abre. ¿Habrá entre ustedes algún padre que,
cuando su hijo le pida pescado, le dé una víbora? ¿O cuando le pida huevo, le
dé un alacrán? Pues, si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus
hijos, ¿cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo
pidan?".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Pidamos, hermanos, el auxilio del Espíritu Santo, para que inspire
nuestras oraciones y ruegue con nosotros por las necesidades del mundo,
respondiendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para los que empiezan a conocer a Cristo y desean la gracia del
bautismo y para que los que preparan el bautismo de sus hijos, pidamos el favor
de Dios todopoderoso.
Para nuestra ciudad (nuestro pueblo), para todos los que habitan en
ella (él), y para todos los pueblos y naciones, pidamos al Señor paz y
prosperidad abundantes.
Para los que persiguen a la Iglesia y para los pecadores que viven
intranquilos, pidamos la luz del Espíritu y la gracia de la conversión.
Por los que estamos aquí reunidos y por aquellos por los que queremos
rezar, pidamos al Señor que nos guarde a todos en la fe y nos reúna en el reino
de su Hijo.
Escucha, Padre santo, la voz de tu Iglesia y haz que comprendamos el
misterio de la oración filial que tu Hijo Jesús nos enseñó; danos tu Espíritu,
para que, invocándote con aquella confianza y perseverancia que él nos enseñó,
crezcamos más y más en la experiencia de tu amor. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que por tu generosidad te presentamos, para
que, por el poder de tu gracia, estos sagrados misterios santifiquen toda
nuestra vida y nos conduzcan a la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
PREFACIO
Nuestra Humanidad salvada por la humanidad de Cristo
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte
gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios poderoso y eterno.
Porque reconocemos como la obra de tu poder admirable no sólo haber socorrido
nuestra débil naturaleza con la fuerza de tu divinidad, sino también el haber
previsto el remedio de nuestra misma naturaleza mortal, y así con lo que fue la
causa de nuestra ruina, con eso mismo nos diste la salvación, por Cristo, Señor
nuestro. Por Él, los ángeles cantan con júbilo eterno y nosotros nos unimos a
sus voces, cantando humildemente tu alabanza
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 102, 2
Bendice alma mía al Señor, y no te olvides de tus beneficios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo recibido, Señor, el sacramento celestial, memorial perpetuo de
la pasión de tu Hijo, concédenos que este don, que él mismo nos dio con tan
inefable amor, nos aproveche para nuestra salvación eterna. El, que vive y
reina por los siglos de los siglos.
viernes, 15 de julio de 2022
DOMINGO XVI DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 17 de julio 2022
LA PALABRA DE DIOS ES VIVA
Gén 18,1-10; Sal 14; Col 1, 24-28; Lc 10,38-42
Nuestras lecturas ejemplifican una realidad que todos los lectores de
la Biblia tenemos que enfrentar, el conflicto de las interpretaciones. La
primera lectura ha sido interpretada como una revelación anticipada de la
Trinidad, mientras que hoy algunos insisten en que adapta el mito antiguo de
los dioses que circulan por el mundo para poner a prueba a los seres humanos.
La segunda lectura ha generado la discusión sobre si realmente en ella se
afirma que el sufrimiento de Cristo es defectuoso. El Evangelio ha sido
interpretado como una instrucción acerca de la prioridad de escuchar la palabra
de Dios, o como el establecimiento de dos formas fundamentales de vida
cristiana (la contemplativa y la activa), o como la supresión del papel activo
de la mujer en la comunidad de Lucas. Pero la Palabra de Dios es viva, ¡y
genera controversias!
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 53. 6. 8
El Señor es mi auxilio y el único apoyo en mi vida. Te ofrece de
corazón un sacrificio y daré gracias a tu nombre, Señor, porque eres bueno.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado
del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende
nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
ORACIÓN COLECTA
Sé propicio, Señor, con tus siervos y multiplica, bondadoso, sobre
ellos los dones de tu gracia, para que, fervorosos en la fe, la esperanza y la
caridad, perseveren siempre fieles en el cumplimiento de tus mandatos.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Señor, no pases junto a mí sin detenerte.
Del libro del Génesis: 18, 1-10
Un día, el Señor se le apareció a Abraham en el encinar de Mambré.
Abraham estaba sentado en la entrada de su tienda, a la hora del calor más
fuerte. Levantando la vista, vio de pronto a tres hombres que estaban de pie
ante él. Al verlos, se dirigió a ellos rápidamente desde la puerta de la
tienda, y postrado en tierra, dijo: "Señor mío, si he hallado gracia a tus
ojos, te ruego que no pases junto a mí sin detenerte. Haré que traigan un poco
de agua para que se laven los pies y descansen a la sombra de estos árboles;
traeré pan para que recobren las fuerzas y después continuarán su camino, pues
sin duda para eso han pasado junto a su siervo". Ellos le contestaron:
"Está bien. Haz lo que dices". Abraham entró rápidamente en la tienda
donde estaba Sara y le dijo: "Date prisa, toma tres medidas de harina,
amásalas y cuece unos panes". Luego Abraham fue corriendo al establo,
escogió un ternero y se lo dio a un criado para que lo matara y lo preparara.
Cuando el ternero estuvo asado, tomó requesón y leche y lo sirvió todo a los
forasteros. El permaneció de pie junto a ellos, bajo el árbol, mientras comían.
Ellos le preguntaron: "¿Dónde está Sara, tu mujer?". Él respondió:
''Allá, en la tienda". Uno de ellos le dijo: "Dentro de un año
volveré sin falta a visitarte por estas fechas; para entonces, Sara, tu mujer,
habrá tenido un hijo".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 14, 2-3ab. 3cd-4ab. 5.
R/. ¿Quién será grato a tus ojos, Señor?
El hombre que procede honradamente y obra con justicia; el que es
sincero en sus palabras y con su lengua a nadie desprestigia. R/.
Quien no hace mal al prójimo ni difama al vecino; quien no ve con
aprecio a los malvados, pero honra a quienes temen al Altísimo. R/.
Quien presta sin usura y quien no acepta soborno en perjuicio de
inocentes. Quienes vivan así serán gratos a Dios eternamente. R/.
SEGUNDA LECTURA
Un designio secreto que Dios ha mantenido oculto y que ahora ha
revelado a su pueblo santo.
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 24-28
Hermanos: Ahora me alegro de sufrir por ustedes, porque así completo lo
que falta a la pasión de Cristo en mí, por el bien de su cuerpo, que es la
Iglesia. Por disposición de Dios, yo he sido constituido ministro de esta
Iglesia para predicarles por entero su mensaje, o sea el designio secreto que
Dios ha mantenido oculto desde siglos y generaciones y que ahora ha revelado a
su pueblo santo. Dios ha querido dar a conocer a los suyos la gloria y riqueza
que este designio encierra para los paganos, es decir, que Cristo vive en
ustedes y es la esperanza de la gloria. Ese mismo Cristo es el que nosotros
predicamos cuando corregimos a los hombres y los instruimos con todos los recursos
de la sabiduría, a fin de que todos sean cristianos perfectos. Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 8, 15
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los que cumplen la palabra del Señor con un corazón bueno y
sincero, y perseveran hasta dar fruto. R/.
EVANGELIO
Marta lo recibió en su casa. María escogió la mejor parte.
Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 38-42
En aquel tiempo, entró Jesús en un poblado, y una mujer, llamada Marta,
lo recibió en su casa. Ella tenía una hermana, llamada María, la cual se sentó
a los pies de Jesús y se puso a escuchar su palabra. Marta, entre tanto, se
afanaba en diversos quehaceres, hasta que, acercándose a Jesús, le dijo:
"Señor, ¿no te has dado cuenta de que mi hermana me ha dejado sola con
todo el quehacer? Dile que me ayude".
El Señor le respondió: "Marta, Marta, muchas cosas te preocupan y
te inquietan, siendo así que una sola es necesaria. María escogió la mejor
parte y nadie se la quitará". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Pidamos, hermanos, al Dios de la misericordia que auxilie nuestra
pequeñez, para que podamos invocar su nombre con los sentimientos que él desea.
Digamos confiadamente: Escúchanos, Señor. (R/. Escúchanos, Señor.)
Por la paz y la concordia de las Iglesias, por la unión de todos los
cristianos y por la salvación de nuestras almas, roguemos al Señor.
Por los responsables de las naciones, para que bajo su gobierno
tengamos una vida feliz y pacífica, roguemos al Señor.
Por los que están lejos de casa, por los enfermos y los encarcelados y
por todos los que sufren, roguemos al Señor.
Por nuestra comunidad reunida en la fe, la piedad y el temor de Dios,
por los que hacen el bien a nuestras parroquias y por los que ayudan a los
pobres, roguemos al Señor.
Dios de bondad, Padre santo, escucha nuestras oraciones y danos un
corazón humilde y sencillo que escuche la palabra de tu Hijo y lo acoja en la
persona de nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que con la perfección de un único sacrificio pusiste fin
a la diversidad de sacrificios de la antigua ley, recibe las ofrendas de tus
fieles, y santifícalas como bendijiste la ofrenda de Abel, para que aquello que
cada uno te ofrece en honor de tu gloria, sea de provecho para la salvación de
todos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
El Misterio de la salvación
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación
darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, compadecido del
extravío de los hombres, quiso nacer de la Virgen María; muriendo en la cruz,
nos libró de la muerte eterna y, resucitando, nos dio vida eterna. Por eso, con
los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin
cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo,
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 110, 4-5
Ha hecho maravillas memorables, el Señor es piadoso y clemente; él da
alimento a sus fieles.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste
alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición
de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220717
La lectura de la Biblia
siempre suscita controversias. En la antigüedad, algunos extirparon ciertos
libros de la Biblia por ser "materiales". En la Edad Media, el
simbolismo, como se presenta en el Libro de Apocalipsis, ha sido debatido. El
uso de las disciplinas históricas en los siglos XVIII y XIX ha puesto en
cuestión la credibilidad histórica de la Escritura. En nuestros días, varios
métodos de interpretación han sido controvertidos, como el posmoderno, la
teología de la liberación, el feminista, y el africano. Para dialogar con este
mar turbulento, podemos acudir a dos salvavidas: la armonía entre la fe (la
Biblia) y la razón (la interpretación); y la convicción de que, como lo expresó
el Vaticano II, "los libros de la Escritura enseñan ... con fidelidad y
sin error, la verdad que Dios quiso consignar en las sagradas letras para
nuestra salvación" (Dei Verbum n. 11).
sábado, 9 de julio de 2022
DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 10 de julio 2022
EL BUEN SAMARITANO
Deut 30, 10-14; Sal 68; Col 1, 15-20; Lc 10, 25-37
En Lucas, el letrado plantea su pregunta en términos de religiosidad
deuteronómica: para vivir bien en este mundo, hay que cumplir (Deut 4, 1); pero
cambia el horizonte a la vida eterna y al mundo nuevo. Jesús hace que responda
el que pregunta. El letrado lo escucha como reproche y busca una escapatoria;
se focaliza en el término "prójimo" e intenta establecer una
discusión casuística sobre él. Para Jesús, en cambio, no hay escapatoria. En
vez de discutir, narra una parábola con dos facetas: urge la misericordia,
sobre todo respecto a los necesitados; e incluye que la gente no judía,
simbolizada por el samaritano, pueda cumplir la ley y entrar en la vida eterna.
No es de extrañar que, después de que Jesús emite el imperativo de "ir y
hacer lo mismo" (v. 37), la respuesta del letrado es el silencio.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 16, 15
Por serte fiel, yo contemplaré tu rostro, Señor, y al despertar, espero
saciarme de gloria.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que muestras la luz de tu verdad a los que andan
extraviados para que puedan volver al buen camino, concede a cuantos se
profesan como cristianos rechazar lo que sea contrario al nombre que llevan y
cumplir lo que ese nombre significa. Por nuestro Señor Jesucristo ...
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado
del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende
nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Los mandamientos están muy a tu alcance para que puedas cumplirlos.
Del libro del Deuteronomio: 30, 10-14
En aquellos días, habló Moisés al pueblo y le dijo: "Escucha la
voz del Señor, tu Dios, que te manda guardar sus mandamientos y disposiciones
escritos en el libro de esta ley. Y conviértete al Señor tu Dios, con todo tu
corazón y con toda tu alma.
Estos mandamientos que te doy no son superiores a tus fuerzas ni están
fuera de tu alcance. No están en el cielo, de modo que pudieras decir: '¿Quién
subirá por nosotros al cielo para que nos los traiga, los escuchemos y podamos
cumplirlos?'. Ni tampoco están al otro lado del mar, de modo que pudieras
objetar: '¿Quién cruzará el mar por nosotros para que nos los traiga, los
escuchemos y podamos cumplirlos?'. Por el contrario, todos mis mandamientos
están muy a tu alcance, en tu boca y en tu corazón, para que puedas
cumplirlos". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 68, 14.17. 30-31. 33-34. 36ab. 37.
R/. Escúchame, Señor, porque eres bueno.
A ti, Señor, elevo mi plegaria, ven en mi ayuda pronto; escúchame
conforme a tu demencia, Dios fiel en el socorro. Escúchame, Señor, pues eres
bueno y en tu ternura vuelve a mí tus ojos. R/.
Mírame enfermo y afligido; defiéndeme y ayúdame, Dios mío. En mi cantar
exaltaré tu nombre, proclamaré tu gloria, agradecido. R/.
Se alegrarán al verlo los que sufren; quienes buscan a Dios tendrán más
ánimo, porque el Señor jamás desoye al pobre ni olvida al que se encuentra
encadenado. R/.
Ciertamente el Señor salvará a Sión, reconstruirá a Judá; la heredarán
los hijos de sus siervos, quienes aman a Dios la habitarán. R/.
SEGUNDA LECTURA
Todo fue creado por medio de él y para él.
De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 15-20
Cristo es la imagen de Dios invisible, el primogénito de toda la
creación, porque en él tienen su fundamento todas las cosas creadas, del cielo
y de la tierra, las visibles y las invisibles, sin excluir a los tronos y
dominaciones, a los principados y potestades. Todo fue creado por medio de él y
para él.
Él existe antes que todas las cosas, y todas tienen su consistencia en
él. Él es también la cabeza del cuerpo, que es la Iglesia. Él es el principio,
el primogénito de entre los muertos, para que sea el primero en todo.
Porque Dios quiso que en Cristo habitara toda plenitud y por él quiso
reconciliar consigo todas las cosas, del cielo y de la tierra, y darles la paz
por medio de su sangre, derramada en la cruz. Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 63.68
R/. Aleluya, aleluya.
Tus palabras, Señor, son espíritu y vida. Tú tienes palabras de vida
eterna. R/.
EVANGELIO
¿Quién es mi prójimo?
Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 25-37
En aquel tiempo, se presentó ante Jesús un doctor de la ley para
ponerlo a prueba y le preguntó: "Maestro, ¿qué debo hacer para conseguir
la vida eterna?". Jesús le dijo: "¿Qué es lo que está escrito en la
ley? ¿Qué lees en ella?". El doctor de la ley contestó: "Amarás al
Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y
con todo tu ser, y a tu prójimo como a ti mismo". Jesús le dijo: "Has
contestado bien; si haces eso, vivirás".
El doctor de la ley, para justificarse, le preguntó a Jesús: "¿Y
quién es mi prójimo?". Jesús le dijo: "Un hombre que bajaba por el
camino de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos ladrones, los cuales lo
robaron, lo hirieron y lo dejaron medio muerto. Sucedió que por el mismo camino
bajaba un sacerdote, el cual lo vio y pasó de largo. De igual modo, un levita
que pasó por ahí, lo vio y siguió adelante. Pero un samaritano que iba de
viaje, al verlo, se compadeció de él, se le acercó, ungió sus heridas con
aceite y vino y se las vendó; luego lo puso sobre su cabalgadura, lo llevó a un
mesón y cuidó de él. Al día siguiente sacó dos denarios, se los dio al dueño
del mesón y le dijo: 'Cuida de él y lo que gastes de más, te lo pagaré a mi
regreso'. ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del hombre
que fue asaltado por los ladrones?". El doctor de la ley le respondió:
"El que tuvo compasión de él". Entonces Jesús le dijo: "Anda y
haz tú lo mismo". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Que nuestras oraciones lleguen, hermanos, a la presencia del Señor y
que nuestros ruegos sean escuchados por aquel que escruta el corazón de todos.
Digamos confiadamente: Escúchanos, Señor. (R/. Escúchanos, Señor.)
Pidamos la sabiduría del Hijo de Dios para los que proclaman con
fidelidad la palabra divina y para todos los ministros que sirven a la Iglesia.
Roguemos al Señor.
Por Israel, el pueblo de la antigua alianza, por los cristianos
separados de la Iglesia católica y apostólica y por los que no conocen al Dios
verdadero, invoquemos al Señor, dueño de toda verdad.
Por los que viven lejos de su casa, por los encarcelados, por los
débiles y oprimidos, y por los justos que sufren persecución, oremos a Jesús el
Salvador.
Invoquemos con fe y devoción al Señor de la gloria por la paz y
felicidad de los que ahora estamos aquí, huéspedes en la casa del Señor.
Roguemos al Señor.
Dios misericordioso y omnipotente, que has querido resumir todos los
preceptos de tu ley en el mandamiento del amor, escucha nuestras oraciones y
danos un corazón solícito y generoso hacia los sufrimientos de nuestros
hermanos, a imagen de tu Hijo, el buen samaritano del mundo, que vive y reina
por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor, los dones de tu Iglesia suplicante, y concede que, al
recibirlos, sirvan a tus fieles para crecer en santidad. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
PREFACIO
Nuestra Humanidad salvada por la humanidad de Cristo
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte
gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios poderoso y eterno.
Porque reconocemos como la obra de tu poder admirable no sólo haber socorrido
nuestra débil naturaleza con la fuerza de tu divinidad, sino también el haber
previsto el remedio de nuestra misma naturaleza mortal, y así con lo que fue la
causa de nuestra ruina, con eso mismo nos diste la salvación, por Cristo, Señor
nuestro. Por Él, los ángeles cantan con júbilo eterno y nosotros nos unimos a
sus voces, cantando humildemente tu alabanza
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr Sal 83, 4-5
El gorrión ha encontrado una casa, y la golondrina un nido donde poner
sus polluelos: junto a tus altares, Señor de los ejércitos, Rey mío y Dios mío.
Dichosos los que viven en tu casa y pueden alabarte siempre.
ORACIÓN DESPUES DE LA COMUNIÓN
Alimentados con los dones que hemos recibido, te suplicamos, Señor,
que, participando frecuentemente de este sacramento, crezcan los efectos de
nuestra salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20220710
La parábola del buen samaritano ha dejado su huella en
nuestro mundo a lo largo de los siglos. Era un tema popular en las vidrieras de
las catedrales medievales, como los de Chartres, Bourgos, y Sens en Francia.
Pintores como Rembrandt Van Rijn (1606-1669), Eugene Delacroix (1798-1863),
Vicente Van Gogh (1853-1890) han producido obras maestras interpretándola. También
ha llamado la atención del Papa Francisco, quien la ha asumido como un elemento
central en su ministerio papal. En el segundo capítulo de su encíclica Fratelli
tutti: sobre la fraternidad y la amistad social, medita sobre los personajes de
la parábola y pregunta a cada uno de nosotros: "¿Con quién te identificas?
Esta pregunta es cruda, directa, y determinante" (n. 64). En ese momento
cuando podamos responder honestamente que con "el samaritano", nos
convertiremos en rayos de luz en medio de las sombras de nuestro mundo cerrado.
viernes, 1 de julio de 2022
DOMINGO XIV DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 3 de julio 2022