Remar Mar Adentro, pretende, como laicos comprometidos, presentar temas de reflexión para vivir el reino de Dios; levantando las anclas en una tarea asumida generosamente. Ricardo Huante Magaña
sábado, 25 de diciembre de 2021
martes, 21 de diciembre de 2021
LA FAMILIA, IMPORTANTE Y CAMBIANTE
En la Biblia, la familia ocupa un
puesto importante. No hubiera podido ser de otro modo, porque los autores
bíblicos nacieron en el marco de una familia. Por lo tanto, la historia de
Jesús empieza en el seno de una familia, como Lucas nos muestra. Jesús es hijo
carnal de María, ligado físicamente a ella por la carne. Es ligado legalmente a
José, por lo cual queda registrado oficialmente como descendiente de David.
Pero su familia biológica y legal queda relativizada y sometida a otra
superior, su relación con el Padre. Por si fuera poco, la familia sufre otro
cambio, el de significado, en la primera carta de Juan. Allí, el Apóstol habla
de los cristianos como hijos de Dios, no por ataduras carnales, legales, o metafísicas,
sino por la gracia y la fe. La familia bíblica es importante, pero siempre
cambiante.
FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA DE JESÚS, MARÍA Y JOSÉ Domingo 26 de diciembre 2021
LA FAMILIA, IMPORTANTE Y CAMBIANTE
1 Sam 1,20-22. 24-28; Sal 83; 1 Jn 3, 1-2. 21-24; Lc 2, 41-52
En la Biblia, la familia ocupa un puesto importante. No hubiera podido
ser de otro modo, porque los autores bíblicos nacieron en el marco de una
familia. Por lo tanto, la historia de Jesús empieza en el seno de una familia,
como Lucas nos muestra. Jesús es hijo carnal de María, ligado físicamente a
ella por la carne. Es ligado legalmente a José, por lo cual queda registrado
oficialmente como descendiente de David. Pero su familia biológica y legal
queda relativizada y sometida a otra superior, su relación con el Padre. Por si
fuera poco, la familia sufre otro cambio, el de significado, en la primera
carta de Juan. Allí, el Apóstol habla de los cristianos como hijos de Dios, no
por ataduras carnales, legales, o metafísicas, sino por la gracia y la fe. La
familia bíblica es importante, pero siempre cambiante.
ANTÍFONA DE ENTRADA Lc 2, 16
Llegaron los pastores a toda prisa y encontraron a María y a José, y al
niño recostado en un pesebre.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado
del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende
nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que te dignaste dejarnos el más perfecto ejemplo en la
Sagrada Familia de tu Hijo, concédenos benignamente que, imitando sus virtudes
domésticas y los lazos de caridad que la unió, podamos gozar de la eterna
recompensa en la alegría de tu casa. Por nuestro Señor Jesucristo ....
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Samuel quedará consagrado de por vida al Señor.
Del primer libro de Samuel: 1, 20-22. 24-28
En aquellos días, Ana concibió, dio a luz un hijo y le puso por nombre
Samuel, diciendo: ''Al Señor se lo pedí". Después de un año, Elcaná, su
marido, subió con toda la familia para hacer el sacrificio anual para honrar al
Señor y para cumplir la promesa que habían hecho, pero Ana se quedó en su casa.
Un tiempo después, Ana llevó a Samuel, que todavía era muy pequeño, a la casa
del Señor, en Siló, y llevó también un novillo de tres años, un costal de
harina y un odre de vino.
Una vez sacrificado el novillo, Ana presentó el niño a Elí y le dijo:
"Escúchame, señor: te juro por mi vida que yo soy aquella mujer que estuvo
junto a ti, en este lugar, orando al Señor. Este es el niño que yo le pedía al
Señor y que él me ha concedido. Por eso, ahora yo se lo ofrezco al Señor, para
que le quede consagrado de por vida". Y adoraron al Señor.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 83,2-3.5-6.9-10.
R/. Señor, dichosos los que viven en tu casa.
Anhelando los atrios del Señor se consume mi alma. Todo mi ser de gozo
se estremece y el Dios vivo es la causa. R/.
Dichosos los que viven en tu casa, te alabarán para siempre; dichosos
los que encuentran en ti su fuerza y la esperanza de su corazón. R/.
Escucha mi oración, Señor de los ejércitos; Dios de Jacob, atiéndeme.
Míranos, Dios y protector nuestro, y contempla el rostro de tu Mesías. R/.
SEGUNDA LECTURA
Nos llamamos hijos de Dios y lo somos.
De la primera carta del apóstol san Juan: 3,1-2.21-24
Queridos hijos: Miren cuánto amor nos ha tenido el Padre, pues no sólo
nos llamamos hijos de; Dios, sino que lo somos. Si el mundo no nos reconoce, es
porque tampoco lo ha reconocido a él.
Hermanos míos, ahora somos hijos de Dios, pero aún no se ha manifestado
cómo seremos al fin. Y ya sabemos que, cuando él se manifieste, vamos a ser
semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.
Si nuestra conciencia no nos remuerde, entonces, hermanos míos, nuestra
confianza en Dios es total. Puesto que cumplimos los mandamientos de Dios y
hacemos lo que le agrada, ciertamente obtendremos de él todo lo que le pidamos.
Ahora bien, éste es su mandamiento: que creamos en la persona de
Jesucristo, su Hijo, y nos amemos los unos a los otros, conforme al precepto
que nos dio. Quien cumple sus mandamientos permanece en Dios y Dios en él. En
esto conocemos, por el Espíritu que él nos ha dado, que él permanece en
nosotros. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Hechos 16,14
R/. Aleluya, aleluya.
Abre, Señor, nuestros corazones, para que aceptemos las palabras de tu
Hijo. R/.
EVANGELIO
Los padres de Jesús lo encontraron en medio de los doctores.
Del santo Evangelio según san Lucas: 2, 41-52
Los padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén para las
festividades de la Pascua. Cuando el niño cumplió doce años, fueron a la
fiesta, según la costumbre. Pasados aquellos días, se volvieron, pero el niño
Jesús se quedó en Jerusalén, sin que sus padres lo supieran. Creyendo que iba
en la caravana, hicieron un día de camino; entonces lo buscaron, y al no
encontrarlo, regresaron a Jerusalén en su busca.
Al tercer día lo encontraron en el templo, sentado en medio de los
doctores, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Todos los que lo oían se
admiraban de su inteligencia y de sus respuestas. Al verlo, sus padres se
quedaron atónitos y su madre le dijo: "Hijo mío, ¿por qué te has portado
así con nosotros? Tu padre y yo te hemos estado buscando llenos de angustia".
Él les respondió: "¿Por qué me andaban buscando? ¿No sabían que debo
ocuparme en las cosas de mi Padre?". Ellos no entendieron la respuesta que
les dio. Entonces volvió con ellos a Nazaret y siguió sujeto a su autoridad. Su
madre conservaba en su corazón todas aquellas cosas. Jesús iba creciendo en
saber, en estatura y en el favor de Dios y de los hombres. Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino
no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede
del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y
gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa,
católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los
pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Oremos, hermanos, a Jesucristo, el Señor, que, para santificar la
familia, quiso compartir la vida de un hogar humano:
Para que el Señor, que quiso participar de la vida de la familia en el
hogar de María y José, mantenga en paz y armonía a todas las familias
cristiana, roguemos al Señor.
Para que los novios sientan la presencia de Dios en la vivencia de su
amor mutuo y se preparen sanamente para su matrimonio, roguemos al Señor.
Para que Dios ilumine y consuele a las familias desunidas, a los
esposos que han de vivir separados por causa del trabajo, a los hijos de los
divorciados, a los hogares sin hijos y a los que lloran la muerte de sus
familiares, roguemos al Señor.
Para que nos esforcemos por vivir en paz y armonía con nuestros
familiares (con los miembros de nuestra comunidad), superando con bondad,
comprensión y caridad fraterna nuestras mutuas desavenencias, roguemos al
Señor.
Señor Dios nuestro, que has querido que tu Hijo, engendrado antes de
todos los siglos, fuera miembro de una familia humana, escucha nuestras
súplicas y haz que los padres y madres de familia participen de la fecundidad
de tu amor, y que sus hijos crezcan en sabiduría, entendimiento y gracia ante
ti y ante los hombres.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te ofrecemos, Señor, este sacrificio de reconciliación, y te pedimos
humildemente que, por la intercesión de la Virgen Madre de Dios y de san José,
fortalezcas nuestras familias en tu gracia y en tu paz. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
PREFACIO
La Salvación por Cristo
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación
darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar; Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno. Pues por amor creaste al hombre, y, aunque condenado
justamente, lo redimiste por tu misericordia, por Cristo, Señor nuestro. Por
El, los ángeles y los arcángeles y todos los coros celestiales celebran tu
gloria, unidos en común alegría. Permítenos asociamos a sus voces, cantando
humildemente tu alabanza:
Santo, Santo, Santo…
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Bar 3, 38
Nuestro Dios apareció en el mundo y convivió con los hombres.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Padre misericordioso, haz que, reanimados con este sacramento
celestial, imitemos constantemente los ejemplos de la Sagrada Familia, para
que, superadas las aflicciones de esta vida, consigamos gozar eternamente de su
compañía. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20211226
Parece casi obvio que la familia humana puede ser una imagen
de la Trinidad. Como en la Trinidad hay tres personas unidas entre sí, así en
la familia hay tres (o más personas) unidas entre sí, No obstante, la teología
católica siempre ha abrigado dudas acerca del tema de la familia humana como
imagen divina. Estas dudas tienen que ver con el carácter carnal de la familia
humana (las personas divinas no pueden nacer físicamente una de otra) y con la
subordinación de los hijos a los padres (las personas divinas son iguales y no
conocen subordinación). Otro motivo importante, sin embargo, es porque las
familias humanas no siempre se comportan como buenas imágenes de Dios, ya que
pueden sufrir rupturas y violencia entre sus miembros. ¿A quién refleja nuestra
familia, a la Trinidad o a la humanidad fragmentada y violenta?
viernes, 17 de diciembre de 2021
DOMINGO IV DE ADVIENTO Ciclo C Domingo 19 de diciembre 2021
UN RELATO CON MUCHOS NIVELES DE SENTIDO
Miq 5,2-4; Sal 79; Heb 10,5-10; Lc 1,39-45
El relato del encuentro entre la Virgen María e Isabel puede
interpretarse en diferentes niveles y de diferentes modos. En un nivel, se
puede interpretar como una muestra de la caridad y la actitud de servicio que
siempre han imbuido la vida de la Virgen: ella va a ayudar a su pariente en los
difíciles días de su embarazo. En otro nivel, se puede leer como un contraste
entre el antiguo pueblo de Israel, simbolizado por la anciana Isabel, y el
nuevo pueblo cristiano, simbolizado por la joven María virgen. En otro nivel
más, se construye como una meditación sobre el origen maravilloso de Jesús, ya
que encontramos eventos extraordinarios, como una joven viajando a por montañas
peligrosas, un niño que salta de alegría en el seno de su madre y un discurso
inspirado por el Espíritu Santo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 15 45, 8
Cielos, destilen el rocío; nubes, lluevan la salvación; que la tierra
se abra y germine el salvador.
No se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Te pedimos, Señor, que infundas tu gracia en nuestros corazones, para
que, habiendo conocido, por el anuncio del ángel, la encarnación de tu Hijo,
lleguemos, por medio de su pasión y de su cruz, a la gloria de la resurrección.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
De ti saldrá el jefe de Israel.
Del libro del profeta Miqueas: 5,1-4
Esto dice el Señor: "De ti, Belén de Efrata, pequeña entre las
aldeas de Judá, de ti saldrá el jefe de Israel, cuyos orígenes se remontan a
tiempos pasados, a los días más antiguos.
Por eso, el Señor abandonará a Israel, mientras no dé a luz la que ha
de dar a luz. Entonces el resto de sus hermanos se unirá a los hijos de Israel.
Él se levantará para pastorear a su pueblo con la fuerza y la majestad del
Señor, su Dios. Ellos habitarán tranquilos, porque la grandeza del que ha de
nacer llenará la tierra y él mismo será la paz". Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 79, 2ac. 3c.15-16.18-19.
R/. Señor, muéstranos tu favor y sálvanos.
Escúchanos, pastor de Israel; tú que estás rodeado de querubines,
manifiéstate; despierta tu poder y ven a salvarnos. R/.
Señor, Dios de los ejércitos, vuelve tus ojos, mira tu viña y visítala;
protege la cepa plantada por tu mano, el renuevo que tú mismo cultivaste. R/.
Que tu diestra defienda al que elegiste, al hombre que has fortalecido.
Ya no nos alejaremos de ti; consérvanos la vida y alabaremos tu poder. R/.
SEGUNDA LECTURA
Aquí estoy, Dios mío, para hacer tu voluntad.
De la carta a los hebreos: 10, 5-10
Hermanos: Al entrar al mundo, Cristo dijo, conforme al salmo: No
quisiste víctimas ni ofrendas; en cambio, me has dado un cuerpo. No te
agradaron los holocaustos ni los sacrificios por el pecado; entonces dije
-porque a mí se refiere la Escritura-: "Aquí estoy, Dios mío; vengo para
hacer tu voluntad". Comienza por decir: "No quisiste víctimas ni
ofrendas, no te agradaron los holocaustos ni los sacrificios por el
pecado" -siendo así que eso es lo que pedía la ley-; y luego añade:
"Aquí estoy, Dios mío; vengo para hacer tu voluntad".
Con esto, Cristo suprime los antiguos sacrificios, para establecer el
nuevo. Y en virtud de esta voluntad, todos quedamos santificados por la ofrenda
del cuerpo de Jesucristo, hecha una vez por todas. Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Lc 1, 38
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy la esclava del Señor; cúmplase en mí lo que me has dicho. R/.
EVANGELIO
¿Quién soy para que la madre de mi Señor venga a verme?
Del santo Evangelio según san Lucas: 1, 39-45
En aquellos días, María se encaminó presurosa a un pueblo de las
montañas de Judea y, entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel. En
cuanto ésta oyó el saludo de María, la criatura saltó en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo y, levantando la voz,
exclamó: "¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!
¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a verme? Apenas llegó tu
saludo a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno. Dichosa tú, que has
creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Pidamos, hermanos, el auxilio del Señor, para que, apiadado del pobre y
del oprimido, venga a salvar al mundo de sus males: Digamos confiadamente: R/.
Ven Señor Jesús.
Para que todos los fieles se dispongan a recibir a Cristo como lo
recibió María y como ella conserven sus palabras en el corazón, roguemos al
Señor.
Para que aquellos hermanos nuestros que han abandonado las prácticas
cristianas, pero acudirán a la iglesia en las próximas fiestas de Navidad
descubran la buena noticia del Evangelio, no como un rayo fugaz en la noche,
sino como luz permanente que ilumina y alegra toda la vida, roguemos al Señor.
Para que las fiestas del nacimiento del Señor, alejen las tinieblas de
quienes viven sumergidos en dudas e incertidumbres y colmen los deseos de
quienes se sienten descorazonados y tristes, roguemos al Señor.
Para que el nacimiento de Cristo nos ayude a renunciar a los deseos
mundanos y a vivir sobria y honradamente, esperando la aparición definitiva del
Señor, roguemos al Señor.
Dios nuestro, que elegiste como templo de tu permanencia a María, la
humilde hija de Israel, escucha nuestras plegarias y concédenos vivir siempre
plenamente adheridos a tu voluntad, imitando la obediencia del Verbo, que vino
al mundo a cumplir las Escrituras. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que santifique, Señor, estos dones, colocados en tu altar, el mismo
Espíritu que fecundó con su poder el seno de la bienaventurada Virgen María.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
MARÍA, NUEVA EVA
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación alabarte,
bendecirte y glorificarte Señor, Padre Santo, Dios todopoderoso y eterno, por
el misterio de la Virgen Madre.
Del antiguo adversario nos vino la ruina, pero en el seno virginal de
la hija de Sión recibió la vida aquél que nos nutre con el pan de los ángeles,
y surgieron para todo el género humano la salvación y la paz.
La gracia que perdimos por Eva nos fue devuelta en María; su maternidad
redimida del pecado y de la muerte, se abre al don de una vida nueva. para que,
donde abundó el pecado sobreabundara tu misericordia por Cristo, nuestro
Salvador.
Por eso nosotros, mientras esperamos la venida de Cristo, unidos a los
ángeles y a los santos, cantamos el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor,
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Is 7,14
Miren: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo, a quien le pondrá el
nombre de Emmanuel.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo recibido esta prenda de redención eterna, te rogamos, Dios
todopoderoso, que, cuanto más se acerca el día de la festividad que nos tae la
salvación, con tanto mayor fervor nos apresuremos a celebrar dignamente el
misterio del nacimiento de tu Hijo. Él, que vive y reina por los siglos de los
siglos.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20211219
Los relatos bíblicos de Adviento y Navidad son tan familiares que podemos narrarlos de memoria. Conocemos cómo el anuncio del nacimiento de Jesús fue hecho a la Virgen María por el ángel Gabriel; cómo Zacarías se negó a creer que su esposa se embarazaría y se quedó mudo como un castigo; cómo reaccionó José cuando descubrió que la Virgen María esperaba a un hijo que no era suyo; y muchos otros. Nuestra familiaridad, sin embargo, no debe conducirnos a descuidar las lecturas de este tiempo. La Biblia tiene una infinidad de riquezas para nosotros. Como ha escrito el Concilio Vaticano II, "es tanta la eficacia que radica en la palabra de Dios, que es, en verdad, apoyo y vigor de la Iglesia, y fortaleza de la fe para sus hijos, alimento del alma, fuente pura y perenne de la vida espiritual" (Dei Verbum, n. 21).
jueves, 16 de diciembre de 2021
Genealogía de Jesucristo Mateo 1, 1-17
Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham:
Abraham engendró a Isaac, Isaac a Jacob, Jacob a Judá y a sus hermanos; Judá
engendró de Tamar a Fares y a Zará; Fares a Esrom, Esrom a Aram, Aram a
Aminadab, Aminadab a Naasón; Naasón a Salmón, Salmón engendró de Rajab a Booz,
Booz engendró de Rut a Obed, Obed a Jesé, y Jesé al rey David. David engendró de la mujer de Urías a Salomón, Salomón a
Roboam, Roboam a Abiá, Abiá a Asaf; Asaf a Josafat; Josafat a Joram; Joram a
Ozías, Ozías a Joatam, Joatam a Acaz, Acaz a Ezequías, Ezequías a Manasés,
Manasés a Amón, Amón a Josías, Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos,
durante el destierro en Babilonia. Después del destierro en Babilonia, Jeconías engendró a
Salatiel, Salatiel a Zorobabel, Zorobabel a Abiud, Abiud a Eliaquim, Eliaquim a
Azor, Azor a Sadoc, Sadoc a Aquim, Aquim a Eliud, Eliud a Eleazar, Eleazar a
Matán, Matán a Jacob, y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual
nació Jesús, llamado Cristo. De modo que el total de generaciones, desde Abraham hasta
David, es de catorce; desde David hasta la deportación a Babilonia, es de
catorce, y desde la deportación a Babilonia hasta Cristo, es de catorce.
viernes, 10 de diciembre de 2021
NICAN MOPOHUA 12 de diciembre 2021
NICAN MOPOHUA «Salió a su encuentro a un lado del cerro y le dijo:
"¿Qué hay, hijo mío el más pequeño? ¿Adónde vas?". ¿Se apenó él un
poco o tuvo vergüenza, o se asustó? Juan Diego se inclinó delante de ella; y le
saludó, diciendo: "Niña mía, la más pequeña de mis hijas. Señora, ojalá
estés contenta.
¿Cómo has amanecido? ¿Estás bien de salud, Señora y Niña mía? Voy a
causarte aflicción: sabe, Niña mía, que está muy malo un pobre siervo tuyo, mi
tío; le ha dado la peste, y está para morir. Ahora voy presuroso a tu casa de
México a llamar uno de los sacerdotes amados de Nuestro Señor, que vaya a
confesarle y disponerle; porque desde que nacimos, venimos a aguardar el
trabajo de nuestra muerte. Pero si voy a hacerlo, volveré luego otra vez aquí,
para ir a llevar tu mensaje. Señora y Niña mía, perdóname; tenme por ahora
paciencia; no te engaño, Hija mía la más pequeña; mañana vendré a toda
prisa". Después de oír la plática de Juan Diego, respondió la piadosísima
Virgen: "Oye y ten entendido, hijo mío el más pequeño, que es nada lo que
te asusta y aflige, no se turbe tu corazón, no temas esa enfermedad, ni otra
alguna enfermedad y angustia. ¿No estoy yo aquí que soy tu Madre? ¿No estás
bajo mi sombra? ¿No soy yo tu salud? ¿No estás por ventura en mi regazo? ¿Qué
más has menester? No te apene ni te inquiete otra cosa; no te aflija la
enfermedad de tu tío, que no morirá ahora de ella: está seguro que ya
sano". (Y entonces sanó su tío según después se supo). Cuando Juan Diego
oyó estas palabras de la Señora del Cielo, se consoló mucho; quedó contento. Le
rogó que cuanto antes le despachara a ver al señor obispo, a llevarle alguna
señal y prueba; a fin de que le creyera». (Del texto original de las
apariciones. Autor: Don Antonio Valeriano 1520-1605).
SOLEMNIDAD, NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE, PATRONA DE AMÉRICA Domingo 12 de diciembre 2021
Era el mes de diciembre de 1531, diez años solamente después de
conquistada Tenochtitlan por los españoles, cuando la santísima Virgen se
apareció al indígena Juan Diego en el cerro del Tepeyac. Lo nombró su embajador
ante el obispo. fray Juan de Zumárraga, para que le construyeran un templo. La
prueba de que las palabras de Juan Diego eran ciertas fueron las rosas que
llevó en su tilma y la preciosa imagen que apareció dibujada en ella. La
santísima Virgen es nuestra Madre. Toda la historia de Juan Diego y de las
apariciones de la Virgen están fundadas en una constante y sólida tradición.
LOS PROTAGONISTAS DE LA HISTORIA
Is 7. 10-14; Sal 66, Gál 4, 4-7 Lc l 39-48
Casi nunca la historia nos narra los acontecimientos simples de los
pobres. En el texto de Lucas encontramos una excepción. A pesar de ser este
evangelista un historiador, no se ha dejado arrastrar por la tendencia a
resaltar las obras de los poderosos de la tierra; él ha querido mostrar los
detalles simples de una realidad que aparentemente no tiene ningún puesto en el
desarrollo histórico de una sociedad que sólo considera importante lo que hacen
los grandes. Aquí el protagonismo es de un par de mujeres, personajes ya de por
sí devaluados en una sociedad machista patriarcal, dos niños que aún sin nacer
ya están llamando la atención del autor y el Espíritu Santo, que llena de gozo
a Isabel para bendecir a su parienta María y el fruto de su vientre y para
cantar la grandeza del Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Apoc 12,1
Una gran señal apareció en el cielo: una mujer vestida de sol, con la
luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre su cabeza.
Se dice Gloria.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado
del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende
nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
ORACIÓN COLECTA
Dios, Padre de misericordia, que has puesto a este pueblo tuyo bajo la
especial protección de la siempre Virgen María de Guadalupe, Madre de tu Hijo,
concédenos, por su intercesión, profundizar en nuestra fe y buscar el progreso
de nuestra patria por caminos de justicia y de paz. Por nuestro Señor
Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
He aquí que la virgen concebirá y dará a luz un hijo.
Del libro del profeta Isaías: 7, 10-14
En aquellos tiempos, el Señor le habló a Ajaz diciendo: "Pide al
Señor, tu Dios, una señal de abajo, en lo profundo o de arriba, en lo
alto". Contestó Ajaz: "No la pediré. No tentaré al Señor".
Entonces dijo Isaías: "Oye, pues, casa de David: ¿No satisfechos
con cansar a los hombres, quieren cansar también a mi Dios? Pues bien, el Señor
mismo les dará por eso una señal: He aquí que la virgen concebirá y dará a luz
un hijo y le pondrán el nombre de Emmanuel, que quiere decir
Dios-con-nosotros". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
Yo soy la madre del amor. Vengan a mí los que me aman.
Del libro del Sirácide (Eclesiástico): 24, 23-31
Yo soy como una vid de fragantes hojas y mis flores son producto de
gloria y de riqueza. Yo soy la madre del amor, del temor, del conocimiento y de
la santa esperanza. En mí está toda la gracia del camino y de la verdad, toda
esperanza de vida y de virtud. Vengan a mí, ustedes, los que me aman y
aliméntense de mis frutos. Porque mis palabras son más dulces que la miel y mi
heredad, mejor que los panales.
Los que me coman seguirán teniendo hambre de mí, los que me beban
seguirán teniendo sed de mí; los que me escuchan no tendrán de qué avergonzarse
y los que se dejan guiar por mí no pecarán. Los que me honran tendrán una vida
eterna. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 66, 2-3. 5. 7-8.
R/. Que te alaben, Señor, todos los pueblos.
Ten piedad de nosotros y bendícenos; vuelve, Señor, tus ojos a
nosotros. Que conozca la tierra tu bondad y los pueblos tu obra salvadora. R/.
Las naciones con júbilo te canten, porque juzgas al mundo con justicia;
con equidad tú juzgas a los pueblos y riges en la tierra a las naciones. R/.
Que te alaben, Señor, todos los pueblos, que los pueblos te aclamen
todos juntos. Que nos bendiga Dios y que le rinda honor el mundo entero. R/.
SEGUNDA LECTURA
Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer.
De la carta del apóstol san Pablo a los gálatas: 4, 4-7
Hermanos: Al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo,
nacido de una mujer, nacido bajo la ley, para rescatar a los que estábamos bajo
la ley, a fin de hacernos hijos suyos.
Puesto que ya son ustedes hijos, Dios envió a sus corazones el Espíritu
de su Hijo, que clama: "¡Abbá!", es decir, ¡Padre! Así que ya no eres
siervo, sino hijo; y siendo hijo, eres también heredero por voluntad de Dios.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Lc 1, 47
R/. Aleluya, aleluya.
Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se llena de júbilo en Dios, mi
salvador. R/.
EVANGELIO
Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre.
Del santo Evangelio según san Lucas: 1, 39-48
En aquellos días, María se encaminó presurosa a un pueblo de las
montañas de Judea y, entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel. En
cuanto ésta oyó el saludo de María, la criatura saltó en su seno. Entonces
Isabel quedó llena del Espíritu Santo y, levantando la voz, exclamó: "¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu
vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a verme? Apenas
llegó tu saludo a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno. Dichosa tú, que
has creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del
Señor". Entonces dijo María: "Mi alma glorifica al Señor y mi
espíritu se llena de júbilo en Dios, mi salvador, porque puso sus ojos en la
humildad de su esclava". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra,
de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo
único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de
Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma
naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres,
y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se
encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Pongamos, hermanos, nuestros ojos en Jesús, que, para salvar al mundo,
quiso nacer de santa María Virgen, y oremos por nuestra nación, por los pueblos
de América Latina y por el bien de todos los hombres:
Para que el Señor, que quiso que la santidad de la Iglesia se
prefigurara y culminara en la perfección de María, conceda a los cristianos de
México y a sus pastores ser vivo reflejo de aquella santidad que resplandece en
la santa Madre de Dios, roguemos al Señor.
Para que nuestra nación, que hoy venera con solemnidad a María, bajo la
advocación de Guadalupe, alcance una paz verdadera y estable y vea alejada de
sus ciudadanos las injusticias y los egoísmos mutuos, roguemos al Señor.
Para que el ejemplo de la fortaleza de María, que sufrió crueles
dolores al pie de la cruz, sea consuelo para los que sufren y esperanza para
quienes se sienten decaídos, roguemos al Señor.
Para que los cristianos de México que hoy celebramos la Solemnidad de
Nuestra Señora de
Guadalupe, demos a los ciudadanos de nuestra nación un claro testimonio
de fe cristiana y una colaboración eficaz a la prosperidad de nuestro pueblo,
roguemos al Señor.
Dios nuestro, que has querido que santa María de Guadalupe fuera ayuda
y patrona del pueblo mexicano, escucha nuestras plegarias y haz que, confiando
en su ayuda poderosa, obtengamos los bienes que te hemos pedido. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones que te presentamos en esta solemnidad de
nuestra Señora de Guadalupe, y haz que este sacrificio nos dé fuerza para
cumplir tus mandamientos, como verdaderos hijos de la Virgen María. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO: La Virgen María, signo materno del
amor de Dios.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor,
Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro.
Porque en tu inmensa bondad has
querido que la Madre de tu Hijo, bajo el título de Guadalupe, fuera especial
Madre nuestra, refugio y Señora, presencia viva en la historia de este pueblo
tuyo.
Ella, mensajera de tu verdad y
signo materno de tu amor, nos brindó compasión, auxilio y defensa, y hoy nos
invita a reconciliarnos contigo y entre nosotros, y a proclamar el Evangelio de
tu Hijo, para hacer que florezcan en nuestras tierras la fraternidad y la paz.
Por eso, con todos los ángeles
y los santos, te alabamos, proclamando sin cesar: Santo, Santo, Santo ...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 147, 20
No ha hecho nada semejante con ningún otro pueblo; a ninguno le ha
manifestado tan claramente su amor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, que acabamos de recibir en este
sacramento, nos ayuden, Señor, por intercesión de santa María de Guadalupe, a
reconocernos y amarnos todos como verdaderos hermanos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20211212
La Solemnidad de Nuestra Señora de Guadalupe nos proporciona
una magnífica oportunidad de reflexionar sobre nuestra historia. La historia no
es sólo un tema para los historiadores que enseñan cursos sobre ella en las
universidades ni tampoco para los políticos que quieren ganar votos para las
próximas elecciones. Es un tema importante para cada persona, porque la
historia nos hizo lo que somos. ¿De dónde venimos? ¿Cómo llegamos hasta aquí?
Si no podemos contestar éstas y otras preguntas similares acerca de nuestra
nación o de toda América Latina, ¿por qué no reflexionar sobre la historia de
nuestra ciudad o nuestro barrio o nuestra familia? Lo importante es resaltar el
papel de los pobres y sencillos porque, como nos ha enseñado La Morenita, con
sabiduría y ternura infinita, son ellos los preferidos de Dios y son ellos los
que protagonizan la historia.
jueves, 9 de diciembre de 2021
SAN JOSÉ, NUESTRO MODELO
Después de
condenar a los malos pastores de Israel, tales como los reyes injustos y falsos
profetas, el Señor, por boca del profeta Jeremías, anuncia que mandará un buen
pastor, retoño de David, que será prudente y reinará con justicia, de hecho, se
le llamará "el-Señor- nuestra-justicia". Él reunirá a las ovejas
dispersas y lastimadas por los malos pastores, y las apacentará en sus campos.
Sabemos que el Buen Pastor por excelencia, es Jesús, quien vino no sólo a
cuidar a las ovejas, sino a dar su vida por ellas (cfr. Jn 10,11).
La larga serie de generaciones que leemos en Mt 1, 1-17, llega a su culmen con José, a través del cual Jesús será también "hijo de David". José y María ya están desposados, aunque todavía no viven juntos. Grande es la sorpresa de José cuando ve a su esposa embarazada, sin que el niño fuera hijo suyo. Esto lo sume en un mar de dudas, hasta que decide abandonarla, para no denunciarla como infiel, pues por eso podrían apedrearla. Hasta que el ángel le explica que el niño es obra del Espíritu Santo, y que acepte en su casa a María como esposa. Le encarga, además, desempeñar un papel muy importante en el misterio de la encarnación: ser papá adoptivo de Jesús. José acepta al futuro recién nacido y, como papá oficial, tendrá que ponerle un nombre que indica su destino: "Jesús, porque él salvará al pueblo de sus pecados". José, "hombre justo", es un modelo admirable de fe y de generosidad; puso toda su vida al servicio de nuestra redención.
martes, 30 de noviembre de 2021
DOMINGO II DE ADVIENTO Ciclo C Domingo 5 de diciembre 2021
EL TIEMPO, UNA REALIDAD SAGRADA
Bar 5, 1-9; Sal 125; Flp 1,
4-6. 8-11; Lc 3, 1-6
Para Lucas es muy importante
resaltar el momento histórico cuando la Palabra del Señor se dirige a Juan
Bautista. Esta tendencia del evangelista no sólo proporciona una oportunidad de
exhibir a sus lectores originales la elegancia de su estilo literario (los
versículos 1 al 2 del Evangelio constituyen una sola frase elegante en el
griego), sino que revela su actitud hacia el tiempo. El tiempo para él no es un
mero flujo de momentos sucesivos, un contexto abstracto necesario para que
ciertos acontecimientos sucedan, sino que puede ser algo sagrado, una
herramienta que Dios utiliza. El tiempo está en la mente de Dios, porque forma
parte de su plan de salvación, y en la voluntad divina, porque Dios quiere
salvar a los seres humanos en los momentos más oportunos. En síntesis, el
tiempo es una realidad sagrada.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Is 30.19.30
Pueblo de Sión, mira que el Señor va a venir para salvar a todas las
naciones y dejará oír la majestad de su voz para alegría de tu corazón.
No se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios omnipotente y misericordioso, haz que ninguna ocupación terrena
sirva de obstáculo a quienes van presurosos al encuentro de tu Hijo, antes
bien, que el aprendizaje de la sabiduría celestial, nos lleve a gozar de su
presencia. El, que vive y reina contigo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Dios mostrará su grandeza.
Del libro del profeta Baruc: 5, 1-9
Jerusalén, despójate de tus vestidos de luto y aflicción, y vístete
para siempre con el esplendor de la gloria que Dios te da; envuélvete en el
manto de la justicia de Dios y adorna tu cabeza con la diadema de la gloria del
Eterno, porque Dios mostrará tu grandeza a cuantos viven bajo el cielo. Dios te
dará un nombre para siempre: "Paz en la justicia y gloria en la
piedad".
Ponte de pie, Jerusalén, sube a la altura, levanta los ojos y contempla
a tus hijos, reunidos de oriente y de occidente, a la voz del espíritu, gozosos
porque Dios se acordó de ellos. Salieron a pie, llevados por los enemigos; pero
Dios te los devuelve llenos de gloria, como príncipes reales.
Dios ha ordenado que se abajen todas las montañas y todas las colinas,
que se rellenen todos los valles hasta aplanar la tierra, para que Israel
camine seguro bajo la gloria de Dios. Los bosques y los árboles fragantes le
darán sombra por orden de Dios. Porque el Señor guiará a Israel en medio de la
alegría y a la luz de su gloria, escoltándolo con su misericordia y su
justicia. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 125, 1-2ab. 2cd-3. 4-5. 6.
R/. Grandes cosas has hecho por nosotros, Señor.
Cuando el Señor nos hizo volver del cautiverio, creíamos soñar;
entonces no cesaba de reír nuestra boca, ni se cansaba entonces la lengua de
cantar. R/.
Aun los mismos paganos con asombro decían: "¡Grandes cosas han
hecho por ellos el Señor!". Y estábamos alegres, pues ha hecho grandes
cosas por su pueblo el Señor. R/.
Como cambian los ríos la suerte del desierto, cambia también ahora
nuestra suerte, Señor, y entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que
siembran con dolor. R/.
Al ir, iban llorando, cargando la semilla; al regresar, cantando
vendrán con sus gavillas. R/.
SEGUNDA LECTURA
Manténganse limpios e irreprochables para el día de Cristo.
De la carta del apóstol san Pablo a los filipenses: 1, 4-6. 8-11
Hermanos: Siempre que pido por ustedes, lo hago con gran alegría,
porque han colaborado conmigo en la causa del Evangelio, desde el primer día
hasta ahora.
Estoy convencido de que aquel que comenzó en ustedes esta obra, la irá
perfeccionando siempre hasta el día de la venida de Cristo Jesús.
Dios es testigo de cuánto los amo a todos ustedes con el amor
entrañable con que los ama Cristo Jesús. Y ésta es mi oración por ustedes: Que
su amor siga creciendo más y más y se traduzca en un mayor conocimiento y
sensibilidad espiritual. Así podrán escoger siempre lo mejor y llegarán limpios
e irreprochables al día de la venida de Cristo, llenos de los frutos de la
justicia, que nos viene de Cristo Jesús, para gloria y alabanza de Dios.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 3, 4.6
R/. Aleluya, aleluya.
Preparen el camino del Señor, hagan rectos sus senderos, y todos los
hombres verán la salvación de Dios. R/.
EVANGELIO
Todos verán la salvación de Dios.
Del santo Evangelio según san Lucas: 3, 1-6
En el año décimo quinto del reinado del César Tiberio, siendo Poncio
Pilato procurador de Judea; Herodes, tetrarca de Galilea; su hermano Filipo,
tetrarca de las regiones de Iturea y Traconítide; y Lisanias, tetrarca de
Abilene; bajo el pontificado de los sumos sacerdotes Anás y Caifás, vino la
palabra de Dios en el desierto sobre Juan, hijo de Zacarías.
Entonces comenzó a recorrer toda la comarca del Jordán, predicando un
bautismo de penitencia para el perdón de los pecados, como está escrito en el
libro de las predicciones del profeta Isaías:
Ha resonado una voz en el desierto: Preparen el camino del Señor, hagan
rectos sus senderos. Todo valle será rellenado, toda montaña y colina,
rebajada; lo tortuoso se hará derecho, los caminos ásperos serán allanados y
todos los hombres verán la salvación de Dios. Palabra del Señor. Gloria a ti,
Señor Jesús.
PROFESIÓN DE FE
CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO
Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los
hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha
del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su
reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que
procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es
una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el
perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
PLEGARIA UNIVERSAL
Salgamos al encuentro del Señor, que se acerca a nosotros con designios
de paz, y presentémosle confiados nuestra plegaria. Digamos confiadamente: Ven
Señor Jesús. (R/. Ven Señor Jesús.)
Para que la Iglesia viva alegre, sin inquietarse por nada, y, llena de
esperanza, crea que el Señor está cerca de ella, roguemos al Señor.
Para que nuestro tiempo, con la ayuda de Dios, goce de seguridad, de
alegría y de paz, roguemos al Señor.
Para que el Señor, con su venida, conforte los corazones abatidos y
fortalezca las rodillas que se doblan, roguemos al Señor.
Para que nuestra fe crea firmemente en los dones que Dios nos promete
y, ayudados por la gracia divina, nos dispongamos a recibir los auxilios que él
nos envía, roguemos al Señor.
Señor Dios, grande en el amor, que llamas a los humildes al esplendor
de tu reino, escucha nuestra oración y endereza nuestro camino hacia ti; abaja
los montes elevados de nuestra soberbia, para que celebremos con fe ardiente la
venida de Jesucristo, tu Hijo. Él, que vive y reina por los siglos de los
siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que te sean agradables, Señor, nuestras humildes súplicas y ofrendas, y
puesto que no tenemos méritos en qué apoyarnos, nos socorra el poderoso auxilio
de tu benevolencia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
La doble espera de Cristo
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte
gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y
eterno, por Cristo nuestro Señor. A quien todos los profetas anunciaron y la
Virgen esperó con inefable amor de madre; Juan lo proclamó ya próximo y lo
señaló después entre los hombres. Él es quien nos concede ahora preparamos con
alegría al misterio de su nacimiento, para encontramos así cuando llegue,
velando en oración y cantando su alabanza. Por eso, con los ángeles y los
arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu
gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria. Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Bar 5, 5; 4, 36
Levántate, Jerusalén, sube a lo alto, para que contemples la alegría
que te viene de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Saciados por el alimento que nutre nuestro espíritu, te rogamos, Señor,
que, por nuestra participación en estos misterios, nos enseñes a valorar
sabiamente las cosas de la tierra y a poner nuestro corazón en las del cielo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20211205
De entre todos los Tiempos litúrgicos del año, Adviento es el
que más dirige nuestra atención al tiempo mismo, pues habla del pasado de
Israel, del presente de la Iglesia y del futuro de la humanidad. Nos recuerda
que el tiempo es trascendental. No intenta dar una definición filosófica del
tiempo (san Agustín de Hipona proclamó, de manera famosa, la dificultad de
hacerlo), sino que nos estimula a meditar sobre nuestra actitud. ¿Cómo
disponemos del tiempo que Dios nos ha otorgado? ¿Lo desperdiciamos,
olvidándonos de su importancia, subestimándolo como una pertenencia de la que
siempre gozaremos, haciéndonos flojos? ¿Lo guardamos con celo, acaparando
nuestros momentos sólo para nosotros, negando nuestro tiempo a los demás que
nos necesitan? ¿O lo consagramos por medio de nuestras plegarias, nuestra
atención asidua y nuestra generosidad? El tiempo es un don divino. Hay que
usarlo sabiamente.
jueves, 25 de noviembre de 2021
DOMINGO I DE ADVIENTO Ciclo C Domingo 28 de noviembre 2021