sábado, 26 de octubre de 2019

DOMINGO XXX DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO C Domingo 27 de octubre 2019




LA HUMILDAD Y LA AUTOCOMPLACENCIA

El fariseo y el recaudador son dos perfiles que nos presenta el Señor Jesús en esta parábola evangélica para invitarnos a vivir con sensatez. Por experiencia propia sabemos que podemos incurrir en poses vanidosas cuando tenemos una imagen demasiado benévola de nosotros mismos. El fariseo se sabe y se siente bueno; más aún, se cree mejor que su prójimo, a quien considera despreciable. El recaudador en cambio conoce de su pecaminosidad y su extravío, lo confiesa claramente ante Dios y pide perdón. En sintonía con lo que afirma el autor del Eclesiástico, podemos afirmar que Dios escucha favorablemente las súplicas de perdón de los humildes. Dios es imparcial y atiende sin demora al clamor de los inocentes. El sabio personaliza el clamor del pobre que no descansa hasta alcanzar a Dios.


ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 104, 3-4

Alégrese el corazón de los que buscan al Señor. Busquen al Señor y serán fuertes; busquen su rostro sin descanso.


GLORIA

Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.


ORACIÓN COLECTA

Dios todopoderoso y eterno, aumenta en nosotros la fe, la esperanza y la caridad, y para que merezcamos alcanzar lo que nos prometes, concédenos amar lo que nos mandas. Por nuestro Señor Jesucristo...


LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

La oración del humilde llega hasta el cielo.

Del libro del Sirácide (Eclesiástico): 35, 15-17. 20-22

El Señor es un juez que no se deja impresionar por apariencias. No menosprecia a nadie por ser pobre y escucha las súplicas del oprimido. No desoye los gritos angustiosos del huérfano ni las quejas insistentes de la viuda.
Quien sirve a Dios con todo su corazón es oído y su plegaria llega hasta el cielo. La oración del humilde atraviesa las nubes, y mientras él no obtiene lo que pide, permanece sin descanso y no desiste, hasta que el Altísimo lo atiende y el justo juez le hace justicia. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 33, 2-3 17-18.19.23

R/. El Señor no está lejos de sus fieles.

Bendeciré al Señor a todas horas, no cesará mi boca de alabarlo. Yo me siento orgulloso del Señor, que se alegre su pueblo al escucharlo. R/.

En contra del malvado está el Señor, para borrar de la tierra su recuerdo. Escucha, en cambio, al hombre justo y lo libra de todas sus congojas. R/.

El Señor no está lejos de sus fieles y levanta a las almas abatidas. Salva el Señor la vida de sus siervos. No morirán quienes en él esperan. R/.


SEGUNDA LECTURA

Ahora sólo espero la corona merecida.

De la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo: 4, 6-8.16-18

Querido hermano: Para mí ha llegado la hora del sacrificio y se acerca el momento de mi partida. He luchado bien en el combate, he corrido hasta la meta, he perseverado en la fe. Ahora sólo espero la corona merecida, con la que el Señor, justo juez, me premiará en aquel día, y no solamente a mí, sino a todos aquellos que esperan con amor su glorioso advenimiento.
La primera vez que me defendí ante el tribunal, nadie me ayudó. Todos me abandonaron. Que no se les tome en cuenta. Pero el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas para que, por mi medio, se proclamara claramente el mensaje de salvación y lo oyeran todos los paganos. Y fui librado de las fauces del león. El Señor me seguirá librando de todos los peligros y me llevará salvo a su Reino celestial: A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2 Co 5. 19
R/. Aleluya, aleluya.

Dios reconcilió consigo al mundo, por medio de Cristo, y a nosotros nos confió el mensaje de la reconciliación. R/.


EVANGELIO

El publicano regresó a su casa justificado y el fariseo no.

Del santo Evangelio según san Lucas: 18, 9-14

En aquel tiempo, Jesús dijo esta parábola sobre algunos que se tenían por justos y despreciaban a los demás: "Dos hombres subieron al templo para orar: uno era fariseo y el otro, publicano.
El fariseo, erguido, oraba así en su interior: 'Dios mío, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: ladrones, injustos y adúlteros; tampoco soy como ese publicano. Ayuno dos veces por semana y pago el diezmo de todas mis ganancias'.
El publicano, en cambio, se quedó lejos y no se atrevía a levantar los ojos al cielo. Lo único que hacía era golpearse el pecho, diciendo: `Dios mío, apiádate de mí, que soy un pecador'.
Pues bien, yo les aseguro que éste bajó a su casa justificado y aquél no; porque todo el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PROFESIÓN DE FE

CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO

Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.


PLEGARIA UNIVERSAL

Confiados en que la oración de los pobres llega hasta el Señor, elevemos con humildad nuestras peticiones a Dios y digamos: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)

Para que el Señor conceda el espíritu de consejo, fortaleza, ciencia y piedad a nuestro obispo N., y a todos los pastores de la Iglesia, roguemos al Señor.

Para que los gobiernos de las naciones edifiquen sus comunidades en la paz, equilibrando toda desigualdad injusta, roguemos al Señor.

Para que el Señor alivie los dolores de los que sufren en el cuerpo o en el espíritu y les dé fuerza para no desfallecer ante la tribulación, roguemos al Señor.

Para que mantenga a nuestras familias firmes en la concordia y seguras en su gracia y amistad, roguemos al Señor.

Dios nuestro, que no miras la fama de los hombres ni te dejas influir por nadie en perjuicio de los pobres, míranos a nosotros, tus siervos, que, como el publicano, no nos atrevemos a levantar la mirada hacia ti, y haz que, humillados como él, seamos enaltecidos en tu reino. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Mira, Señor, los dones que presentamos a tu majestad, para que lo que hacemos en tu servicio esté siempre ordenado a tu mayor gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor.

PREFACIO

El Misterio Pascual y el Pueblo de Dios

En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, por su Misterio Pascual, realizó la obra maravillosa de llamamos de la esclavitud del pecado y de la muerte al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de tu propiedad, para que, trasladados por ti de las tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas. Por eso con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 19, 6

Nos alegraremos en tu victoria y cantaremos alabanzas en el nombre de nuestro Dios.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Que tus sacramentos, Señor, produzcan en nosotros todo lo que significan, para que lo que ahora celebramos en figura lo alcancemos en su plena realidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.


UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20191027



Todos los conocemos, se sienten tan perfectos, tan merecedores del reconocimiento público que pareciera que Dios algo le quedó a deber por ser tan buenos. Son esos buenos que resultan insoportables por tan pagados de sí mismos. El retrato del fariseo es un llamado a la modestia y la humildad. Si alguien conoce nuestra fragilidad es Dios y no le podemos impresionar con nuestras ínfulas de santidad. La antítesis final que cierra el relato evangélico a todo el que se encumbra lo abajará y al que se abaja lo encumbrarán, es una ley de vida que conviene atender, no solamente en nuestras relaciones humanas, sino en especial ante Dios. Si no es posible mentirnos a nosotros mismos, tampoco resulta posible mentirle a Dios. La humildad y la modestia del recaudador que reconoce su condición pecadora nos resultará más oportuna delante de Dios.


miércoles, 23 de octubre de 2019

San Juan Pablo II, 22 de octubre. Memoria de



Juan Pablo II, fue el máximo representante de la Iglesia Católica, siendo el Papa N° 264 y sumo pontífice por más de 26 años. Nace en Wadowice, Polonia el día 18 de mayo del año 1920, bajo el nombre de Karol Józef Wojtyła. Perdió a su madre a los nueve años, y luego a sus dos hermanos.

Su padre fallece en 1941 durante el periodo nazi. Realizo sus clases de primaria y secundaria, Estudió en la Universidad Jagellónica de Cracovia, y asistía a la escuela de teatro. En 1939, el ejército alemán clausuro la universidad.

Karol Wojtyła inició labores en una cantera, posteriormente en la planta química Solvay, para aliviar sus problemas financieros y no ser enviado a Alemania. En 1942 sintió su vocación sacerdotal, iniciando la formación en el seminario clandestino de monseñor Adam Sapieha.

Fue ordenado sacerdote en Cracovia, el 1 de noviembre de 1946; enviado a Roma, se hizo doctor en teología en 1948. Regresa a Polonia como vicario de la parroquia de Niegowić y profesor de la Facultad de Teología de la Universidad Jagellónica.

En agosto de 1949 Karol fue nombrado vicario de San Florián, en Cracovia, y consejero de los estudiantes. Fue profesor de ética y teología moral en el seminario mayor de Cracovia y en la Facultad de Teología de Lublín.

Fue nombrado Obispo Auxiliar de Cracovia y titular de Ombi, siendo ordenado el 28 de septiembre de 1958. El 13 de enero de 1964 fue nombrado arzobispo de Cracovia por el Papa Pablo VI, luego instituido Cardenal el 26 de junio de 1967. Participó del Concilio Vaticano II.

Al fallecer el papa Juan Pablo I, Karol Wojtyła fue elegido como nuevo papa el 16 de octubre de 1978 tomando el nombre de Juan Pablo II; tenía el reto de guiar a la iglesia del mundo postmoderno con la nueva evangelización, ecumenismo, la paz y la conservación de la doctrina.

Juan Pablo II sufrió un grave atentado el 13 de mayo de 1981 en la Plaza San Pedro, del cual pudo sobreponerse, pero que le dejo secuelas. En 1983 visitó en la cárcel a su atacante, para perdonarle. Promovió años jubilares, entre los que se destaca el jubileo del Año 2000.


Creo la Jornada Mundial de la Juventud, con participación mundial. Presidió muchas canonizaciones y beatificaciones para motivar la fe del hombre actual. Instituyó diócesis, reformó el código de derecho canónico y el catecismo de la iglesia católica.

Destacan entre sus escritos 14 Encíclicas, 15 Exhortaciones apostólicas, 45 Cartas apostólicas y 11 Constituciones. Su acercamiento a las multitudes fue único: audiencias, ceremonias, visitas pastorales. Juan Pablo II viajó por el mundo, visitando más de 129 países.

Falleció en Roma, el sábado 2 de abril de 2005, siendo visitado por innumerables fieles hasta su sepultura el día 8 de abril en las Grutas Vaticanas. Fue beatificado el 1 de mayo de 2011, por Papa Benedicto XVI y el Papa Francisco lo canonizó el 27 de abril del 2014.

sábado, 19 de octubre de 2019

DOMINGO XXIX DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C (o bien, Domund) Domingo 20 de octubre 2019




LA VERDADERA JUSTICIA, NOS VIENE DE DIOS

De manera explícita lo anticipa el relato evangélico y de forma tácita lo insinúa el pasaje del Éxodo. Mientras Moisés levanta las manos para implorar el auxilio de Dios, la victoria acompaña a Israel, cuando deja de hacerlo, prevalece el adversario. En el breve relato de la viuda persistente y el juez pragmático apreciamos un mensaje similar sobre la eficacia de la oración perseverante. Como toda comparación esta también cojea. Dios no muestra la insensibilidad del juez inicuo y, por tanto, no sería necesario insistir en nuestros ruegos. Dios se mantiene atento y cercano al clamor de sus hijos. Ni los muchos ruegos, ni las frases rebuscadas son necesarias en este caso. La justicia para que lo sea, tiene que ser pronta. Por eso mismo el Señor Jesús nos asegura que Dios hace justicia sin retraso alguno.


ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 16, 6. 8

Te invoco, Dios mío, porque tú me respondes; inclina tu oído y escucha mis palabras. Cuídame, Señor, como a la niña de tus ojos y cúbreme bajo la sombra de tus alas.


GLORIA

Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.


ORACIÓN COLECTA

Dios todopoderoso y eterno, haz que nuestra voluntad sea siempre dócil a la tuya y que te sirvamos con un corazón sincero. Por nuestro Señor Jesucristo...


LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Mientras Moisés tenía las manos en alto, dominaba Israel.

Del libro Éxodo: 17, 8-13

Cuando el pueblo de Israel caminaba a través del desierto, llegaron los amalecitas y lo atacaron en Refidim. Moisés dijo entonces a Josué: "Elige algunos hombres y sal a combatir a los amalecitas. Mañana, yo me colocaré en lo alto del monte con la vara de Dios en mi mano".
Josué cumplió las órdenes de Moisés y salió a pelear contra los amalecitas. Moisés, Aarón y Jur subieron a la cumbre del monte, y sucedió que, cuando Moisés tenía las manos en alto, dominaba Israel, pero cuando las bajaba, Amalec dominaba.
Como Moisés se cansó, Aarón y Jur lo hicieron sentar sobre una piedra, y colocándose a su lado, le sostenían los brazos. Así, Moisés pudo mantener en alto las manos hasta la puesta del sol. Josué derrotó a los amalecitas y acabó con ellos. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 120, 1-2. 3-4. 5-6. 7-8.

R/. El auxilio me viene del Señor.

La mirada dirijo hacia la altura de donde ha de venirme todo auxilio. El auxilio me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra. R/.

No dejará que des un paso en falso, pues es tu guardián y nunca duerme. No, jamás se dormirá o descuidará el guardián de Israel. R/.

El Señor te protege y te da sombra, está siempre a tu lado. No te hará daño el sol durante el día ni la luna, de noche. R/.

Te guardará el Señor en los peligros y cuidará tu vida; protegerá tus ires y venires, ahora y para siempre. R/.


SEGUNDA LECTURA

El hombre de Dios será perfecto y enteramente preparado para toda obra buena.

De la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo: 3, 14-4, 2

Querido hermano: Permanece firme en lo que has aprendido y se te ha confiado, pues bien sabes de quiénes lo aprendiste y desde tu infancia estás familiarizado con la Sagrada Escritura, la cual puede darte la sabiduría que, por la fe en Cristo Jesús, conduce a la salvación.
Toda la Sagrada Escritura está inspirada por Dios y es útil para enseñar, para reprender, para corregir y para educar en la virtud, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto y esté enteramente preparado para toda obra buena.
En presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos, te pido encarecidamente, por su advenimiento y por su Reino, que anuncies la palabra; insiste a tiempo y a destiempo; convence, reprende y exhorta con toda paciencia y sabiduría. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

O bien: (DOMUND) Lecc. III p. 675-676

La fe; viene de la predicación y la predicación consiste en anunciar la palabra de Cristo.

De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 10, 9-18

Hermanos: Basta que cada uno declare con su boca A que Jesús es el Señor y que crea en su corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, para que pueda salvarse. En efecto, hay que creer con el corazón para alcanzar la santidad y declarar con la boca para alcanzar la salvación. Por eso dice la Escritura: Ninguno que crea en él quedará defraudado, porque no existe diferencia entre judío y no judío, ya que uno mismo es el Señor de todos, espléndido con todos los que lo invocan, pues todo el que invoque al Señor como a su Dios, será salvado por él
Ahora bien, ¿cómo van a invocar al Señor, si no creen en él? ¿Y cómo van a creer en él, si no han oído hablar de él? ¿Y cómo van a oír hablar de él, si no hay nadie que se lo anuncie? ¿Y cómo va a haber quienes lo anuncien, si no son enviados? Por eso dice la Escritura: ¡Qué hermoso es ver correr sobre los montes al mensajero que trae buenas noticias!
Sin embargo, no todos han creído en el Evangelio. Ya lo dijo Isaías: Señor, ¿quién ha creído en nuestra predicación? Por lo tanto, la fe viene de la predicación y la predicación consiste en anunciarla palabra de Cristo.
Entonces, yo pregunto: ¿Acaso no habrán oído la predicación? ¡Claro que la han oído!, pues la Escritura dice: La voz de los mensajeros ha resonado en todo el mundo y sus palabras han llegado hasta el último rincón de la tierra. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Hb 4, 12
R/. Aleluya, aleluya.

La palabra de Dios es viva y eficaz y descubre los pensamientos e intenciones del corazón. R/.


EVANGELIO

Dios hará justicia a sus elegidos que claman a él.

Del santo Evangelio según san Lucas: 18, 1-8

En aquel tiempo, para enseñar a sus discípulos la necesidad de orar siempre y sin desfallecer, Jesús les propuso esta parábola:
"En cierta ciudad había un juez que no temía a Dios ni respetaba a los hombres. Vivía en aquella misma ciudad una viuda que acudía a él con frecuencia para decirle: ‘Hazme justicia contra mi adversario'.
Por mucho tiempo, el juez no le hizo caso, pero después se dijo: 'Aunque no temo a Dios ni respeto a los hombres, sin embargo, por la insistencia de esta viuda, voy a hacerle justicia para que no me siga molestando' ".
Dicho esto, Jesús comentó: "Si así pensaba el juez injusto, ¿creen ustedes acaso que Dios no hará justicia a sus elegidos, que claman a él día y noche, y que los hará esperar? Yo les digo que les hará justicia sin tardar. Pero, cuando venga el Hijo del hombre, ¿creen ustedes que encontrará fe sobre la tierra?". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PROFESIÓN DE FE

CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO

Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.


PLEGARIA UNIVERSAL (DOMUND)

Oremos hermanos, a Dios Padre, por medio de Jesucristo, su Hijo, que se entregó por la salvación de todos, pidámosle: Te rogamos, Señor (R/. Te rogamos, Señor.)

Para que el Espíritu Santo fortalezca a los obispos y a los presbíteros de los países de misiones y los asista de manera que conduzcan sus jóvenes Iglesias hacia una verdadera madurez cristiana, roguemos al Señor.

Para que el Señor infunda su Espíritu Santo en los misioneros y haga que su apostolado y su testimonio sean verdaderamente evangélicos y no de sabiduría únicamente humana, roguemos al Señor.

Para que los cristianos que viven en países de misiones den un testimonio verdadero de amor a Jesucristo, se sientan ricos por el conocimiento del Evangelio y no se avergüencen nunca de su pobreza humana, roguemos al Señor.

Para que nosotros y los miembros de nuestras comunidades consideremos como parte integrante de nuestra fe la solicitud apostólica de transmitir la luz y la alegría del Evangelio al mundo no cristiano, roguemos al Señor.

Señor Jesucristo, que sabes lo que hay en el interior de cada hombre y amas a todos, porque por todos te has entregado, escucha nuestra oración y haz que sean muchos los que tengan un amor tan grande que estén dispuesto, como tú, a entregar la propia vida por los hermanos y para anunciarles el Evangelio el Evangelio de salvación. Tú, que vives y reinas por los siglos de los siglos.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Concédenos, Señor, el don de poderte servir con libertad de espíritu, para que, por la acción purificadora de tu gracia, los mismos misterios que celebremos nos limpien de toda culpa. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PREFACIO

El Misterio Pascual y el Pueblo de Dios

En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, por su Misterio Pascual, realizó la obra maravillosa de llamamos de la esclavitud del pecado y de la muerte al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de tu propiedad, para que, trasladados por ti de las tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas. Por eso con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 32, 18-19

Los ojos del Señor están puestos en sus hijos, en los que esperan en su misericordia; para librarlos de la muerte, y reanimarlos en tiempo de hambre.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Te rogamos, Señor, que la frecuente recepción de estos dones celestiales produzca fruto en nosotros y nos ayude a aprovecharlos bienes temporales y alcanzar con sabiduría los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.


UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20191020


Si damos la vuelta al elogio de la perseverancia, podremos aplicarlo también a la participación ciudadana y a la vida cívica. El Señor Jesús partía de los engorrosos trámites legales para animarnos a suplicar confiadamente a Dios. El mensaje sigue siendo válido en tanto que en ocasiones nuestra confianza en Dios parece flaquear. Sin embargo, podemos aprovecharlo para el logro de propósitos e iniciativas sociales y políticas. Quienes disponen de una pequeña parcela de poder terminan por sentirse dueños de éste, olvidando que son funcionarios y servidores del pueblo que es el verdadero soberano. El desdén y el desaire que en ocasiones recibimos en hospitales u otras instituciones de carácter público no tendrán que desalentarnos, ni hacernos claudicar. En el ejercicio de nuestros derechos, sobre todo aquellos que afectan nuestra salud y nuestra dignidad, tendremos que ser perseverantes y respetuosos.


viernes, 11 de octubre de 2019

DOMINGO XXVIII DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C Domingo 13 de octubre 2019




 DE LA LEPRA Y LA GRATITUD

El relato de la curación de Naamán y la escena de los diez leprosos curados en el Evangelio son un elogio de la inclusión y la gratitud. El ministro sirio reconoce que su piel ha quedado limpia no tanto por la intervención de Eliseo, sino por obra del Dios de Israel. Por eso toma la decisión de servir con exclusividad al Dios del profeta. En contraparte, aparece Guejazí, un servidor del profeta que quiere cobrar a Naamán, el favor que Eliseo le regaló. Su mezquindad será sancionada por su maestro. El relato de los diez leprosos es la constatación sobre la escasez de la gratitud. Los nueve leprosos que no regresaron con Jesús para darle gracias no fueron capaces de cambiar un poco sus planes para alabar al Señor. Como ocurre en otros relatos ejemplares del Evangelio de San Lucas, el modelo del buen obrar es un samaritano. Los valores humanos y los valores cristianos se hacen presentes en la vida de personas que no parecieran tenerlos.


ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 129, 3-4

Si conservaras el recuerdo de nuestras faltas, Señor, ¿quién podría resistir? Pero tú, Dios de Israel, eres Dios de perdón.


GLORIA

Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a quienes ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.


ORACIÓN COLECTA

Te pedimos, Señor, que tu gracia continuamente nos disponga y nos acompañe, de manera que estemos siempre dispuestos a obrar el bien. Por nuestro Señor Jesucristo...


LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Volvió Naamán a donde estaba el hombre de Dios y alabó al Señor

Del segundo libro de los Reyes: 5, 14-17

En aquellos días, Naamán, el general del ejército de Siria, que estaba leproso, se bañó siete veces en el Jordán, como le había dicho Eliseo, el hombre de Dios, y su carne quedó limpia como la de un niño.
Volvió con su comitiva a donde estaba el hombre de Dios y se le presentó diciendo: "Ahora sé que no hay más Dios que el de Israel. Te pido que aceptes estos regalos de parte de tu siervo". Pero Eliseo contestó: "Juro por el Señor, en cuya presencia estoy, que no aceptaré nada". Y por más que Naamán insistía, Eliseo no aceptó nada.
Entonces Naamán le dijo: "Ya que te niegas, concédeme al menos que me den unos sacos con tierra de este lugar, los que puedan llevar un par de mulas. La usaré para construir un altar al Señor, tu Dios, pues a ningún otro dios volveré a ofrecer más sacrificios". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 97, 1.2-3 ab. 3cd-4.

R/. El Señor nos ha mostrado su amor y su lealtad.

Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han dado la victoria. R/.

El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel. R/.

La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.


SEGUNDA LECTURA

Si nos mantenemos firmes, reinaremos con Cristo.

De la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo: 2, 8-13

Querido hermano: Recuerda siempre que Jesucristo, descendiente de David, resucitó de entre los muertos, conforme al Evangelio que yo predico. Por este Evangelio sufro hasta llevar cadenas, como un malhechor; pero la palabra de Dios no está encadenada. Por eso lo sobrellevo todo por amor a los elegidos, para que ellos también alcancen en Cristo Jesús la salvación, y con ella, la gloria eterna.
Es verdad lo que decimos: "Si morimos con él, viviremos con él; si nos mantenemos firmes, reinaremos con él; si lo negamos, él también nos negará; si le somos infieles, él permanece fiel, porque no puede contradecirse a sí mismo". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 1 Ts 5, 18
R/. Aleluya, aleluya.

Den gracias siempre, unidos a Cristo Jesús, pues esto es lo que Dios quiere que ustedes hagan. R/.


EVANGELIO

¿No ha habido nadie, fuera de este extranjero, que volviera para dar gloria a Dios?

Del santo Evangelio según san Lucas: 17,11-19

En aquel tiempo, cuando Jesús iba de camino a Jerusalén, pasó entre Samaria y Galilea. Estaba cerca de un pueblo, cuando le salieron al encuentro diez leprosos, los cuales se detuvieron a lo lejos y a gritos le decían: ¡Jesús, maestro, ten compasión de nosotros!".
Al verlos, Jesús les dijo: "Vayan a presentarse a los sacerdotes". Mientras iban de camino, quedaron limpios de la lepra.
Uno de ellos, al ver que estaba curado, regresó, alabando a Dios en voz alta, se postró a los pies de Jesús y le dio las gracias. Ése era un samaritano. Entonces dijo Jesús: "¿No eran diez los que quedaron limpios? ¿Dónde están los otros nueve? ¿No ha habido nadie, fuera de este extranjero, que volviera para dar gloria a Dios?". Después le dijo al samaritano: "Levántate y vete. Tu fe te ha salvado". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PROFESIÓN DE FE

CREDO NICENO_CONSTANTINOPOLITANO

Creo en un sólo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un sólo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un sólo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
Amén.


PLEGARIA UNIVERSAL

Llenos de confianza en el Señor, oremos, hermanos, por todos los hombres y por todas sus necesidades y digamos confiadamente: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)

Para que Dios conceda el espíritu de paciencia y de caridad a los cristianos perseguidos por su nombre y los ayude a ser testigos fieles y verídicos de su Evangelio, roguemos al Señor.

Para que Dios conceda prudencia a los gobernantes y honradez a todos los súbditos, a fin de que se mantengan la armonía y la justicia en la sociedad, roguemos al Señor.

Para que el Señor, el único que puede hacer prosperar el trabajo del hombre, bendiga los esfuerzos de los trabajadores y haga que la tierra dé frutos abundantes para todos, roguemos al Señor.

Para que Dios no permita que en la hora de nuestra muerte, desesperados y sin acordamos de él, nos sintamos como arrancados de este mundo, sino que, confiados y con una gran paz, leguemos a la vida feliz y eterna, roguemos al Señor.

Dios nuestro, fuente y origen de la vida temporal y eterna, escucha las oraciones de tu Iglesia y haz que no busquemos únicamente la salud del cuerpo; que los que nos hemos reunido este domingo volvamos para alabarte por el don de la fe, y que toda la Iglesia sea testigo dela salvación que tú obras continuamente en Cristo, tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Recibe, Señor, las súplicas de tus fieles junto con estas ofrendas que te presentamos, para que, lo que celebramos con devoción, nos lleve a alcanzar la gloria del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PREFACIO

El Misterio Pascual y el Pueblo de Dios

En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación darte gracias y alabarte siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo Señor nuestro. Quien, por su Misterio Pascual, realizó la obra maravillosa de llamamos de la esclavitud del pecado y de la muerte al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de tu propiedad, para que, trasladados por ti de las tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas. Por eso con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 33, 11

Los ricos se empobrecen y pasan hambre; los que buscan al Señor, no carecen de nada.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Dios nuestro, te pedimos que así como nos nutres con el sagrado alimento del Cuerpo y de la Sangre de tu Hijo, nos hagas participar de la naturaleza divina. Por Jesucristo, nuestro Señor.

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20191013




Estas narraciones relacionadas con la curación de personas afectadas por la lepra, además de comunicar un mensaje de esperanza e inclusión, ponen el acento en el tema de la gratitud. La carencia de algún bien nos permite valorarlo. Sin embargo, no siempre sucede así. Naamán y el leproso samaritano (2 Re 5, 14-17:2) parecen ser la excepción más que la regla. Ante la gratuidad de Dios, manifiesta en la persona de Jesús (Lc 17, 11-19) y de Eliseo, conviene responder con gratitud. La civilidad es tan importante como la justicia. Es necesario aprender a dar a cada uno lo que le pertenece, vivir conforme a los propios principios, pero a la vez es importante aprender a agradecer a Dios y a los demás, los gestos de bondad que nos dispensan con tanta generosidad. Se necesita disponer de una buena dosis de humildad para expresar nuestro agradecimiento a quien nos trata con bondad y calidez.