miércoles, 26 de febrero de 2020

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20200301

Una de las condiciones básicas para alcanzar una existencia verdaderamente humanizadora y plena es la responsabilidad ética. No se puede vivir en libertad, si uno no reflexiona y se hace cargo de la tarea de contrastar el bien con el mal. En las circunstancias cambiantes de la historia, podemos incurrir en confusiones lamentables: llamamos con palabras altisonantes -transformación histórica, cambio de paradigma- a viejas formas de gobierno autoritarias. Delitos crasos y burdos como los homicidios y en particular los feminicidios, no tienen justificación alguna. Son barbarie y nada más provocan tanto sufrimiento que no pueden encontrar ningún atenuante moral. Los violentos no tienen ninguna justificación que alegar. Los cristianos tenemos un referente incuestionable: El Evangelio nos presenta la figura de Jesús como un hombre pleno, libre de autoengaños.

No hay comentarios:

Publicar un comentario